
Gareca enfrenta su futuro incierto mientras la Roja busca una hazaña
2025-03-25
Autor: Pedro
Clasificar al Mundial de manera directa parece ser una quimera y conseguirlo a través del repechaje se presenta como un reto monumental, pero aún hay una pizca de esperanza matemática. Sin embargo, las perspectivas futbolísticas son sombrías y el proceso de Ricardo Gareca se encuentra al borde del colapso. La reciente derrota ante Paraguay en Asunción afectó gravemente sus posibilidades (ya de por sí críticas), haciendo que una victoria contra Ecuador este martes sea una obligación, ya que posteriormente deberá enfrentarse a Argentina, visitar a Bolivia y Brasil, y cerrar en casa contra Uruguay.
El partido clave para la Roja
Este martes a las 21:00, la Selección Chilena y su entrenador se juegan demasiado. Cualquier resultado que no sea una victoria podría poner fin a sus esperanzas de clasificar a los próximos partidos del Mundial, quedando solo cuatro encuentros en las Eliminatorias. Aunque en Juan Pinto Durán opinan que la última oportunidad podría diluirse tras el enfrentamiento contra Bolivia, lo cierto es que una derrota esta noche en el Estadio Nacional sería el golpe final para un proceso que en un inicio había generado ilusiones tras algunos amistosos prometedores, pero que ha chocado con la dura realidad en los partidos oficiales.
Números preocupantes de Gareca
Los números de Gareca son alarmantes: un triunfo, tres empates y seis derrotas en solo 10 encuentros oficiales. Esto se traduce en un mediocre 20% de rendimiento para un técnico que está entre los mejor remunerados de Sudamérica, y que ahora ve a Chile ocupando el último lugar de la tabla de posiciones. En todas las Eliminatorias, el equipo no ha logrado vencer a ninguna de las selecciones que están en los primeros seis lugares.
Dudas sobre el futuro de Gareca
Incluso Pablo Milad, presidente de la ANFP, ha dejado entrever dudas sobre la continuidad de Gareca. “Vamos a ver y analizar lo que viene. Necesitamos buenas vibras para el martes, hay que ganar ese partido y entonces mirar con la calculadora", indicó tras la derrota en Asunción.
Un mal resultado contra los dirigidos por Sebastián Beccacece podría forzar una conversación entre la dirigencia y Gareca sobre su futuro. Durante esa conversación, se buscarían alternativas para terminar anticipadamente su costoso contrato. No obstante, despedirlo no será sencillo, ya que el mismo técnico ha expresado que no tiene intención de dejar el cargo. “Dejar a Chile es imposible. Mi enfoque es dejar una huella. Estos puntos son decisivos", declaró antes del encuentro.
Complicaciones económicas para la ANFP
Su contrato, que asciende a 2.7 millones de dólares anuales, se revisará si las posibilidades matemáticas de clasificar al Mundial 2026 se esfuman. Si se decide despedirlo de manera unilateral, la ANFP tendría que asumir los sueldos restantes hasta septiembre, es decir, una indemnización de 1.350.000 dólares. Esto complica aún más la delicada situación económica de la ANFP, lo que ha llevado a la dirigencia a esperar un gesto del entrenador para mitigar dicha cifra.
Alineación y bajas en el equipo
A pesar de la caída ante Paraguay, Gareca ha mantenido su alineación habitual, realizando solo un cambio al alinear a Diego Valdés en lugar de Alexander Aravena. La incertidumbre persiste sobre su rendimiento, ya que Valdés podría intentar jugar por la banda, como hizo anteriormente con poco éxito, o centralizarse como en su club. En la previa, el único cambio en relación con el partido contra Venezuela fue la inclusión de Felipe Loyola por el lesionado Fabián Hormazábal, lo que pone de manifiesto la rigidez táctica del entrenador argentino al definir su equipo.
La plantilla también está lidiando con la baja de Alexis Sánchez por lesión, y aunque tuvo algunas sesiones de entrenamiento antes de su baja, Gareca no parece convencido por su nivel actual. Esto ha levantado dudas sobre el rol de Sánchez en la titularidad del equipo.
Un partido decisivo de esperanza
Con un equipo afectado anímicamente y ante la posibilidad de una eliminación anticipada, la Roja busca desesperadamente una victoria que le permita estirar la agonía y mantener viva la esperanza de clasificar al Mundial.