El Gobierno de Estados Unidos ha tomado una sorprendente decisión al prohibir el ingreso al país de la expresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, quien ocupó el cargo entre 2007 y 2015. Esta drástica medida, anunciada el pasado viernes, responde a su involucramiento en "importantes actos de corrupción durante su mandato público".

La declaración fue realizada por el secretario de Estado de EEUU, Marco Rubio, quien además destacó que el exministro de Planificación argentina, Julio Miguel De Vido, y miembros de sus familias también se encuentran bajo esta prohibición.

Según las autoridades estadounidenses, tanto Cristina Fernández como De Vido "abusaron de sus cargos al orquestar y beneficiarse económicamente de tramas de soborno relacionadas con contratos de obras públicas", lo que resultó en un robo millonario al gobierno argentino.

Desde el año 2024, múltiples tribunales argentinos han dictado condenas contra CFK y De Vido por corrupción, lo que ha socavado la confianza tanto del pueblo argentino como de los inversores internacionales en el futuro del país.

Este movimiento marca un cambio significativo en la relación entre Argentina y EEUU, especialmente bajo la administración del presidente Donald Trump, quien ha enfatizado su compromiso a nivel global en el combate contra la corrupción, incluso en las más altas esferas del poder.

Importante señalar que la justicia argentina ya había confirmado en noviembre de 2024 una condena de seis años de cárcel contra Cristina Fernández por el caso ‘Vialidad’. En este caso, se investigaron irregularidades en la concesión de 51 obras viales a la empresa del empresario Lázaro Báez, hechos ocurridos tanto bajo su gobierno como en el de su esposo, el fallecido expresidente Néstor Kirchner.

De acuerdo con un fallo de más de 1,700 páginas, se estima que el total robado al Estado asciende a cerca de 85 mil millones de pesos argentinos, lo equivalente a más de 83,500 millones de pesos chilenos.

A pesar de la sentencia original dictada en diciembre de 2022, Cristina Fernández no ha sido encarcelada aún, ya que el fallo no ha quedado firme. Este escándalo plantea serias preguntas sobre la integridad y transparencia en la política argentina, y qué otras sorpresas podrían surgir en esta saga que ha mantenido en vilo a todo un país.