¡El Impactante Costo Ambiental de la Aviación Privada! Los 'falcons' Emplean 500 Veces Más CO2 que un Ciudadano Común
2024-11-07
Autor: Martina
Las emisiones de dióxido de carbono (CO2) procedentes de la aviación privada han aumentado de manera alarmante, con un incremento del 46% entre 2019 y 2023. Este tipo de vuelos no solo consume mucha más energía, sino que también genera residuos de CO2 por pasajero que son significativamente mayores a los de los vuelos comerciales, a pesar de que solo representan un mero 0,003% de la población global—aproximadamente 256.000 personas. Cada uno de estos usuarios contamina casi 500 veces más CO2 al año que un ciudadano promedio.
Un dato revelador es que los grandes eventos internacionales de los últimos años han sido los principales responsables de picos en las emisiones aéreas. Por ejemplo, la final de la Copa del Mundo de 2022 en Catar generó la mayor cantidad de vuelos privados, con un total de 1.846 vuelos que resultaron en casi 15.000 toneladas de CO2. A esto se suma el Foro Económico Mundial de Davos, que también atrajo 660 aviones privados. Irónicamente, la COP28, realizada el año pasado en Dubái para abordar el cambio climático, se convirtió en uno de los eventos con más vuelos privados, alcanzando 644 vuelos que emitieron alrededor de 4.800 toneladas de CO2.
Cerca de un 25% de los aviones que asistieron a la COP28 también formaron parte de los vuelos a la final de la Copa del Mundo, aunque no necesariamente sus pasajeros eran los mismos, ya que muchos de estos vuelos eran chárter. Eventos como la Superbowl en Arizona y el Festival de Cannes también contribuyeron significativamente a este fenómeno.
La COP28 se destacó como la mayor cumbre climática hasta la fecha, con 97.000 delegados y 400.000 visitantes, y una huella de carbono aterradora, donde el 60% se atribuyó a la actividad aérea. La próxima COP29, que iniciará la semana entrante en Bakú (Azerbaiyán), prevé una asistencia reducida, de entre 40.000 y 50.000 delegados.
Un estudio, realizado por Stefan Gössling y su equipo en la Universidad Linnaeus de Suecia, analizó más de 18 millones de vuelos privados realizados por casi 26.000 jets desde 2019 hasta 2023. Los resultados publicados en Communications Earth & Environment revelaron que estos vuelos generaron aproximadamente 15,6 millones de toneladas de CO2 en 2023, equivalentes a una media de 3,6 toneladas de CO2 por vuelo. Este aumento de emisiones no solo es alarmante, sino que también representa alrededor del 1,8% de las totales producidas por la aviación comercial en el mismo año.
Curiosamente, se descubrió que casi la mitad de estos vuelos cubrieron trayectos inferiores a 500 kilómetros, y que la mayoría de ellos se realizaron durante los fines de semana, reflejando su uso predominantemente recreativo en lugar de laboral.
VÍCTOR RESCO DE DIOS, profesor de Ingeniería Forestal en la Universidad de Lleida, añade que el 10% más rico de la población es responsable del 50% de estas emisiones, lo que sugiere que la clave para combatir el cambio climático podría no estar en cambiar los hábitos del consumidor promedio, sino en moderar el estilo de vida de ese 10% profundamente contaminante. ¡El cambio climático es real y las cifras no mienten! ¿Hasta cuándo seguiremos ignorando esta crisis ambiental?