Los problemas de memoria son un tema alarmante en España, donde se sitúa en el séptimo lugar de Europa con los índices más altos. Un análisis de Eurostat reveló que en 2022, el 19,6% de la población española enfrentó dificultades moderadas o severas para concentrarse y recordar información. ¡Y eso no es todo! Más de 800.000 personas en el país viven con Alzheimer, una enfermedad que afecta profundamente la calidad de vida.

Interesantemente, las mujeres tienen el doble de riesgo de sufrir deterioro cognitivo que los hombres. Las razones detrás de esto son complejas e incluyen factores biológicos y socioculturales. Uno de estos factores cruciales es la menopausia, un proceso que no solo afecta los ovarios, sino que tiene un gran impacto en la salud cerebral.

La conexión entre la menopausia y la función cerebral

La menopausia, un fenómeno natural que marca el fin de la capacidad reproductiva de la mujer, también está asociada con varios síntomas neurológicos. La neuróloga de Harvard, Lisa Mosconi, ha estado investigando cómo esta transición hormonal afecta al cerebro, destacando que el 70% de las mujeres experimentan síntomas neurológicos durante esta etapa.

Durante la perimenopausia, cuando los niveles de estrógeno fluctúan drásticamente, muchas mujeres reportan olvidos y una notable disminución en su capacidad para aprender y retener información. Esta niebla mental es un desafío real que afecta la vida diaria de las mujeres.

La importancia de la nutrición cerebral

Para combatir estos efectos, Mosconi enfatiza la importancia de mantener una dieta adecuada para la salud cerebral. La alimentación juega un papel fundamental en la prevención de la demencia y el Alzheimer. Pero, ¿qué alimentos deben evitarse?

La neuróloga alerta sobre los peligros de los alimentos procesados, la comida rápida y las grasas saturadas. Más alarmante aún, un estudio publicado en *Neurology* establece que el consumo elevado de alimentos ultraprocesados se liga a un mayor riesgo de desarrollar Alzheimer y demencia vascular. Sustituir estos productos por alimentos frescos puede ser una estrategia efectiva para mejorar la memoria y la salud cognitiva.

Los efectos de las grasas trans

Las grasas trans son especialmente perjudiciales. Según Mosconi, consumir más de 2 gramos de grasas trans al día duplica el riesgo de demencia. Para contrarrestar estos efectos, se recomienda incorporar a la dieta abundantes frutas y verduras, pescado rico en omega-3 y aceites saludables. La glucosa también es esencial, ya que el cerebro depende de ella para funcionar óptimamente.

Además de la dieta, la hidratación es clave. La neuróloga advierte que incluso una leve deshidratación puede ocasionar síntomas neurológicos como confusión mental y fatiga.

La clave del futuro: ¡Cuida tu cerebro hoy!

Así que, mujeres, ¡a poner en práctica estos consejos! Mantener un estilo de vida saludable, cuidando la alimentación y la hidratación, es clave para preservar la salud de nuestro cerebro y mantener la memoria intacta a lo largo de los años. No esperes a que sea demasiado tarde, ¡empieza hoy mismo a cuidar tu bienestar mental!