En el ámbito de la discusión sobre la Ley de Migración y Extranjería, la Comisión de Gobierno Interior de la Cámara de Diputados ha solicitado al subsecretario del Interior, Luis Cordero, la realización de un estudio que analice los costos asociados a la construcción de una barrera física en varios puntos fronterizos del país, especialmente en la zona norte.

El diputado independiente Rubén Oyarzo, que preside esta delegación, enfatizó la urgente necesidad de implementar un muro o valla fronteriza de al menos 200 kilómetros para enfrentar lo que considera un problema serio de migración irregular.

Oyarzo también instó a Cordero a proporcionar una justificación técnica en caso de que no esté a favor de esta medida, subrayando que es imperativo entender por qué no se considera viable.

Mientras tanto, otro miembro de la comisión, el diputado republicano José Maza, argumentó que "hay una invasión de migrantes ilegales" y sugirió la necesidad de invertir en crear una zanja en la frontera para mitigar la situación.

En el otro lado del espectro político, el diputado Jaime Sáez del Frente Amplio, advirtió sobre la importancia de regularizar la situación de los migrantes ya establecidos en Chile, cuestionando la eficacia de las medidas propuestas. Por otro lado, la diputada Joanna Pérez del partido demócrata criticó al gobierno, señalando que existe un "doble estándar" en la forma en que se maneja el tema migratorio.

El debate no se limita a la construcción de muros y barreras. La directora jurídica del Servicio Jesuita a Migrantes, Gabriela Hilliger, hizo un llamado a la protección de los derechos de la niñez migrante, criticando a los políticos que exigen una "migración ordenada, segura y regular" mientras al mismo tiempo facilitan las expulsiones de migrantes en situaciones irregulares.

Hilliger también expresó su preocupación por una disposición de la ley que permitiría revocar las visas de niños y adolescentes migrantes si sus padres o cuidadores son expulsados, lo que podría poner en riesgo la protección de los derechos de la infancia. En este sentido, ella insistió en que cualquier normativa debe implementarse sin discriminación basada en la nacionalidad.

Este debate sobre la Ley de Migración y la posible construcción de un muro fronterizo está generando una fuerte división entre diferentes sectores políticos y sociales en el país, y plantea interrogantes sobre el futuro de la política migratoria en Chile. La cuestión es: ¿será este muro la solución a la crisis migratoria, o estamos ante una medida que violaría los derechos humanos de los más vulnerables?