
Cerdos moribundos y canibalismo: la oscura realidad de granjas con sellos de bienestar animal
2025-03-08
Autor: Santiago
El Gobierno de Aragón ha tomado medidas drásticas, abriendo un expediente sancionador contra la explotación ganadera Agra Pur SL, dedicada a la cría y engorde de cerdos, ubicada en Alfamén, Zaragoza. Curiosamente, la carne de esta empresa se utiliza principalmente para la producción del Jamón de Teruel D.O.P., un producto que se encuentra en grandes cadenas de supermercados. Pero, ¿realmente sabemos qué hay detrás de este delicioso manjar?
El expediente se activó tras las alarmantes denuncias de la organización Igualdad Animal, que presentó pruebas de irregularidades graves en las prácticas de esta granja. Las imágenes obtenidas por los inspectores revelan situaciones de canibalismo, agresiones entre los animales, lesiones y deformidades, todo ello resultado de una completa falta de atención veterinaria y de condiciones inhumanas.
Los cerdos convivían en condiciones insalubres, con agua sucia, hacinamiento extremo, temperaturas extremas, ratas a su alrededor, e incluso cadáveres dejados a su suerte en áreas comunes. Esta alarmante situación no sólo es un acto de brutalidad hacia los animales, sino que también representa un serio riesgo para la salud pública.
Las irregularidades han llevado a posibles multas de hasta 100.000 euros por infracciones en bienestar animal, además de la clausura y el retiro de la autorización administrativa de la granja. Pero eso no es todo; la organización Igualdad Animal ha solicitado una trazabilidad completa de los cerdos, para saber de dónde vienen y adónde van, creando un sistema de control integral que debería ser obligatorio en la industria alimentaria.
A pesar de las regulaciones existentes, la falta de inspecciones efectivas ha permitido que estas prácticas inaceptables continúen. Es importante destacar que el Programa Nacional de Control Oficial del Bienestar Animal exige una tasa mínima de inspecciones tan baja que pone en riesgo a millones de animales: solo se inspecciona el 3% de las explotaciones ganaderas. Esta cifra es completamente inadecuada para garantizar el bienestar animal.
Agra Pur presume en su página web de contar con múltiples certificados de bienestar animal, alegando que cumplen con normas que superan los requisitos legales. Sin embargo, las evidencias recopiladas cuestionan rotundamente la validez de esos sellos, al mostrar un panorama completamente diferente frente a lo que la empresa quiere presentar.
No es la única granja bajo la lupa: otra explotación ubicada en Ontiñena (Huesca) también ha sido denunciada, supuestamente vinculada a Joaquín Bayona y CIA, un grupo que se ostenta como pionero en el sector al recibir un sello de bienestar animal de AENOR.
Estos descubrimientos ponen de manifiesto una realidad devastadora: el maltrato y la desatención hacia los animales no son excepciones, sino una norma en la industria porcina española. Igualdad Animal ha estado documentando estas prácticas durante más de quince años, obteniendo pruebas que revelan una y otra vez una total falta de ética.
Como sociedad, no podemos permanecer indiferentes ante esta brutalidad. Urge tomar medidas, tanto a nivel individual como colectivo. Mientras exigimos reformas profundizadas y seguimos trabajando para la protección legal de los animales, es vital recordar nuestra responsabilidad como consumidores. Debemos cuestionar de dónde proviene nuestra comida y cómo se producen esos productos que se encuentran en nuestras mesas. La industria alimentaria necesita un cambio radical; nuestra voz puede ser el inicio de esa transformación.