Salud

¡Alerta en las aulas! Profesores advierten sobre el alarmante deterioro del bienestar de sus alumnos

2025-03-20

Autor: Emilia

En los últimos años, un creciente número de investigaciones ha revelado un deterioro notable en el bienestar socioemocional de los niños y adolescentes en España. Este grave asunto fue expuesto en el informe titulado "Mejorando la protección y el bienestar en las escuelas", presentado recientemente en Madrid por la ONG Educo y la Fundación SM. En este informe se pone de manifiesto la complejidad creciente en la relación entre alumnos y docentes.

Los datos son preocupantes: un 39% de los docentes señala que experimenta síntomas de ansiedad y depresión, mientras que el 20,8% de los adolescentes presenta problemas de salud mental. Este informe destaca que los profesores observan un "deterioro generalizado" en el bienestar emocional de los estudiantes y subrayan una mayor "necesidad de afecto", un fenómeno exacerbado por el impacto psicológico de la pandemia de COVID-19.

Entre las causas que se apuntan en el estudio, se menciona la situación familiar, donde muchos padres no pueden ofrecer el tiempo de calidad necesario para sus hijos. Además, el abuso de la tecnología es evidente, con un aumento alarmante del tiempo que los estudiantes pasan frente a las pantallas. Uno de los testimonios de los docentes refleja la realidad: "Muchos de nuestros alumnos vienen totalmente dormidos porque han estado con el móvil o en redes sociales hasta las 3 de la mañana".

Los efectos no solo se sienten en los alumnos, sino que también el bienestar del profesorado se ve gravemente afectado. Con aulas que a menudo tienen 25 alumnos de distintos orígenes y con diversas necesidades, la carga se vuelve insostenible. Un docente de Galicia lo describe claramente: "A veces tienes la sensación de que estás haciendo de psicólogo, educador social, de padre y de madre". Esta realidad hace que la atención personalizada sea casi imposible, lo que afecta tanto a los alumnos como a la moral de los docentes.

El informe también hace hincapié en la falta de reconocimiento hacia el profesorado, especialmente en las etapas escolares más tempranas, donde muchos padres tienden a minimizar la labor docente y considerarla poco exigente. Además, la desconexión entre la formación educativa de los docentes y las necesidades reales en las aulas, unida a la burocracia excesiva y los constantes cambios en la legislación educativa, complican aún más el panorama.

En conclusión, este estudio no solo lanza una advertencia sobre la crisis del bienestar en las aulas, sino que también invita a la sociedad a reflexionar sobre el papel crucial que juegan tanto los alumnos como los docentes. ¿Estamos realmente haciendo lo suficiente para cuidar de nuestros jóvenes y de quienes los educan? ¡Es hora de actuar antes de que sea demasiado tarde!