Rodri Hernández, centrocampista del Manchester City, ha encendido las alarmas de la UEFA al declarar: “Creo que estamos cerca de ello”, refiriéndose a la posibilidad de que los futbolistas paralicen las competiciones debido a la desmedida carga de partidos que se impondrá con el nuevo formato de la Champions League. “Alguien debe preocuparse de nosotros”, añadió el jugador español, evidenciando el creciente descontento entre sus colegas.

Las quejas no son nuevas. Desde FIFPro, el sindicato mundial de futbolistas, ya se han manifestado en contra de la nueva normativa, argumentando que jugar entre 60 y 70 partidos al año no es saludable. “He experimentado que un futbolista puede rendir al máximo con 40 a 50 encuentros. Este año, quizás lleguemos a los 80, y eso es excesivo. La calidad del espectáculo es lo importante, no solo el dinero y el marketing. Necesitamos descansar para ofrecer un fútbol de alta calidad”, expresó Rodri, poniendo en relieve una preocupación compartida entre muchos futbolistas.

La voz de Alisson Becker, arquero del Liverpool, también se ha alzado en los últimos días contra esta situación. “Es increíble para los aficionados, pero nadie pregunta a los jugadores sobre la adición de más partidos. A veces, parece que nuestra opinión no vale nada”, se lamentó el brasileño.

El deseo de los futbolistas es claro: quieren dar lo mejor en el campo, pero la fatiga les impide competir al más alto nivel. "Necesitamos encontrar una solución", insistió Alisson, destacando que las condiciones actuales no favorecen ni al fútbol ni a los jugadores.

La disconformidad ha sido respaldada por un reciente informe de la Federación Internacional de Asociaciones de Futbolistas Profesionales, que revela que algunos jugadores solo disfrutan del 12% del año como tiempo libre, es decir, menos de un día completo a la semana. La situación se complicará aún más previsto con un calendario cargado de partidos en torneos europeos y el Mundial de Clubes de 2025, además de sus compromisos con sus respectivas selecciones.

Un ejemplo alarmante es el caso de Federico Valverde, mediocampista del Real Madrid, quien podría enfrentarse a un calendario que le lleve a jugar hasta 80 partidos en una sola temporada. La pregunta que todos se hacen ahora es: ¿Estamos al borde de una huelga en el fútbol europeo?

Con la presión de atraer a fans y generar ingresos, los organismos de fútbol deben considerar el bienestar de los jugadores para evitar una crisis que podría impactar negativamente en el deporte. La discusión sobre el equilibrio entre espectáculo y salud física es más relevante que nunca en la élite del fútbol.