¡Victoria sorpresiva para los conservadores en Bulgaria! ¿Lograrán formar un gobierno?
2024-10-28
Autor: Carmen
El ex primer ministro Boïko Borisov ha vuelto a tomar las riendas, logrando una victoria impactante en las recientes elecciones generales en Bulgaria, las séptimas desde 2021. Tras el escrutinio del 82% de los votos, el partido conservador populista GERB obtuvo el 26% de las preferencias, según informó la Comisión Central Electoral. Sin embargo, la formación de una coalición de gobierno se prevé extremadamente complicada.
El partido reformista y proeuropeo PP-BD se posicionó como la segunda fuerza con un 14,7%, seguido del partido ultranacionalista y prorruso "Resurrección", que alcanzó el 13,8%. Un total de nueve partidos lograron ingresar al Parlamento, que cuenta con 240 escaños, un hecho alarmante para la estabilidad política del país.
Entre las formaciones destacadas se encuentran la DPS Nueva Generación, que ronda entre el 9% y el 10% de los votos, y la Alianza para los Derechos y Libertades, que osciló entre el 8% y el 9%. Ambas agrupaciones surgieron recientemente tras la división del tradicional partido DPS, donde sus líderes, Delyan Peevski y Ahmed Dogan, protagonizaron una intensa lucha de poder.
Los partidos tradicionales también se vieron afectados, con el partido socialista (ex comunista) BSP alcanzando un 8%, mientras que el partido de protesta ITN se movió entre el 6% y el 7%. Además, el nuevo partido populista MECH (que significa "Espada" en búlgaro) logró un escaso 4%. A pesar del panorama fragmentado, estos resultados subrayan la creciente polarización política en Bulgaria.
La situación se complica para Borisov, ya que necesitará tejer alianzas con tres o cuatro partes diferentes para lograr la mayoría de 121 escaños, un objetivo ambicioso en un contexto de enemistades personales y rivalidades ideológicas. Las diferencias entre los partidos son palpables, desde la postura pro-Rusia hasta la lucha contra la corrupción y la integración en la UE.
La participación electoral fue del 34%, un dato superior a las expectativas de los analistas. Tras los resultados preliminares, Borisov declaró su intención de formar una coalición, mencionando que estaría dispuesto a negociar con los partidos que apoyen el programa de GERB, excluyendo al partido Resurrección por sus vínculos políticos.
Sin embargo, entre críticas de corrupción y nepotismo que han perseguido a Borisov, se plantean dudas sobre su capacidad para establecer un gobierno estable. El objetivo de introducir a Bulgaria en la zona euro para el año próximo se presenta como un privilegio, pero también como un reto en un país donde la corrupción es endémica.
Desde 2021, Bulgaria ha vivido una crisis política casi perpetua, con gobiernos que no han durado más de nueve meses. Este último evento electoral podría ser un punto de inflexión, pero también representa una nueva etapa de incertidumbre política y social en el país más pobre de la Unión Europea. A medida que se desarrollan las negociaciones, la atención global se centrará en cómo Borisov intentará superar este caos político.
¿Qué implicaciones tendrá este escenario político para el futuro de Bulgaria y su relación con la Unión Europea? La próxima semana será crucial para definir el camino a seguir.