Nueva York, Colorado, Maryland, Missouri y Arizona han hecho historia al votar a favor de enmiendas constitucionales que garantizan el acceso al aborto, un derecho que se vio amenazado tras la derogación de la emblemática sentencia Roe v. Wade por parte del Tribunal Supremo de Estados Unidos.

En Maryland, donde el aborto ya era legal, esta reforma va más allá al incorporar en la constitución "el derecho a la libertad reproductiva, incluida y no limitada a la habilidad para tomar decisiones para prevenir, continuar o terminar el embarazo". Esto significa que cualquier intento futuro de revertir estos derechos deberá superar un alto umbral legal.

Por su parte, Missouri ha aprobado una reforma constitucional que protege el derecho al aborto, revocando así una prohibición casi absoluta que había entrado en vigor tras la revocación de Roe v. Wade. Esta nueva legislación permitirá el aborto hasta las 24 semanas de gestación, algo que ha sido celebrado por muchos defensores de los derechos reproductivos. "No aceptamos que se nos imponga esta pesadilla", declaró Tori Schafer, de la ACLU Missouri, enfatizando la lucha por proteger el acceso al aborto en el estado.

En Nueva York, aunque la reforma no es tan explícita, se amplía la legislación contra la discriminación por "sexo, incluida orientación sexual, identidad de género, embarazo y salud reproductiva". Esto crea un entorno más inclusivo y protege a las personas que enfrentan discriminación debido a su estado reproductivo.

Colorado también ha reforzado la protección del aborto en su constitución, eliminando el veto actual a la financiación pública para abortos. Esto facilitará que aquellos que necesiten un aborto puedan acceder a la atención médica necesaria a través de Medicaid, un paso adelante en la lucha por los derechos de las mujeres.

Arizona no se quedó atrás, aprobando una enmienda que consagra el derecho al aborto hasta la viabilidad del feto—es decir, hasta la semana 24 de embarazo—con excepciones permitidas si un médico determina que es necesario para proteger la vida de la madre.

Mientras tanto, en Nevada, la medida por el derecho al aborto avanzó, pero no entrará en vigor hasta 2026, y la enmienda será sometida nuevamente a votación. Esto ha generado cierta preocupación entre los defensores de los derechos reproductivos, quienes temen que cambios políticos puedan deshacer los logros alcanzados.

A pesar de estos avances, en estados como Florida, Dakota del Sur y Nebraska, se han fracasado iniciativas para blindar el derecho al aborto. En Florida, la prohibición del aborto a partir de la sexta semana se mantiene firme. Aunque la mayoría de los votantes se manifestó a favor de levantar la prohibición, la participación electoral no alcanzó el 60% requerido para que la enmienda prosperara.

"La realidad es que una minoría de los votantes de Florida ha decidido que la Enmienda 4 no se apruebe", lamentó Lauren Brenzel, directora de campana de la campaña a favor de la enmienda, quien expresó su frustración con la situación actual. Sin embargo, la batalla por los derechos reproductivos continúa en un país donde las decisiones sobre el cuerpo de las mujeres están más politizadas que nunca.