El Consejo Superior de Deportes (CSD) ha tomado una decisión monumental al estimar el recurso presentado el 7 de enero por los futbolistas Dani Olmo y Pau Víctor, así como por el FC Barcelona, anulando el controvertido acuerdo de la Comisión de Seguimiento del Convenio de Coordinación RFEF-LaLiga.

Este anuncio, realizado desde Madrid el 3 de abril de 2025, marca un hito importante en la gestión del fútbol español. El CSD ha declarado que la Comisión de Seguimiento carecía de la competencia necesaria para denegar el visado previo y la licencia federativa solicitada para los jugadores. La decisión de la Comisión fue calificada de "nula de pleno derecho", lo que significa que no tiene validez legal y no puede ser aplicada.

En un procedimiento marcado por la claridad, se ha evidenciado que la Comisión no solo excedió su autoridad, sino que también ignoró las funciones básicas que le están atribuidas en el convenio entre la RFEF y LaLiga. Estas funciones se limitan a la interpretación y vigilancia del cumplimiento de lo pactado, no a la anulación de licencias.

A pesar de los intentos de la RFEF y LaLiga de argumentar que simplemente ratificaron decisiones anteriores, el CSD ha desenmascarado esta justificación como insuficiente. Se dejó claro que el acuerdo impugnado no comportó una ratificación, sino una negativa explícita a conceder las licencias a Olmo y Víctor.

Es importante resaltar que, con esta resolución, ambos jugadores mantienen su licencia en vigor, ya que no existe resolución alguna que cancele sus derechos como futbolistas. Desde el 8 de enero, gracias a una medida cautelar del CSD, sus derechos profesionales han estado protegidos mientras se resolvía esta disputa.

El CSD ha subrayado que su decisión no se inmiscuye en el control económico que LaLiga ejerce sobre sus clubes. Este control recae en el Órgano de Validación de Presupuesto de LaLiga, lo que separa las responsabilidades y competencias en este ámbito.

Finalmente, en un deporte donde las decisiones pueden cambiar vidas, esta resolución va más allá de los jugadores involucrados; establece un precedente significativo sobre la autoridad de las instituciones en el fútbol español. Sin duda, el caso de Dani Olmo y Pau Víctor será recordado en la historia del deporte. ¡Un triunfo que resuena en toda la afición!