En un esfuerzo conjunto para atender a los afectados por la reciente Dana en la Comunidad Valenciana, un equipo de voluntarios de la Cruz Roja de Cataluña ha sido enviado a Valencia. Esta noche, múltiples vehículos logísticos y el Centro Móvil de Operaciones de la Cruz Roja han llegado al lugar para colaborar en las labores de limpieza y asistencia a la población. El equipo se centrará en distribuir alimentos y agua, así como en ofrecer acompañamiento psicosocial a las personas que lo necesiten.

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido un aviso que anticipa tormentas muy fuertes para este domingo, con acumulaciones de precipitación que podrían alcanzar entre 100 y 150 litros por metro cuadrado en áreas ya afectadas por inundaciones recientes. Las alertas se han activado en regiones como Murcia, Cataluña y la Comunidad Valenciana, especialmente en localidades costeras y en el interior.

Mientras tanto, los bomberos de Bilbao han denunciado que se les ha prohibido participar en la ayuda a Valencia, a pesar de tener recursos listos para desplegar. Este hecho ha generado críticas sobre la coordinación entre los cuerpos de seguridad y el gobierno local, lo que ha debilitado potencialmente la respuesta a la crisis.

El conseller de Infraestructuras, Vicente Martínez Mus, ha anunciado que se limitará la circulación de personas en las zonas más golpeadas durante el domingo, en ciudades como Aldaia y Alaquás, para facilitar el trabajo de los equipos de emergencia. Asimismo, ha quedado establecido un límite de 2,000 voluntarios en la Ciudad de las Artes y las Ciencias para organizar la ayuda.

En respuesta a la situación crítica, el Gobierno ha accedido a colaborar en cinco grupos de trabajo propuestos por el presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón. Aunque aún no se ha confirmado qué ministros participarán, se ha asegurado que se transferirán recursos humanos y logísticos necesarios para afrontar la emergencia.

Mazón ha instado a la presencia inmediata de varios ministros para abordar diferentes áreas, desde la sanidad hasta la vivienda y el empleo, con el fin de implementar planes de acción urgentes. Se está priorizando la recuperación de los suministros esenciales y el apoyo a los más vulnerables, incluyendo medidas especiales para los trabajadores autónomos afectados por la situación.

El presidente regional también ha enfatizado la importancia de mantener viva la solidaridad en la población valenciana y el resto de España, resaltando que la recuperación será un esfuerzo colectivo. Se espera que el gobierno acelere la activación del Fondo de Solidaridad Europeo en apoyo a la recuperación de las áreas devastadas por la Dana.

Con más de 10,000 voluntarios dispuestos a ayudar, la ciudadanía y las instituciones se movilizan para restaurar la normalidad en Valencia. Se prevé un largo camino hacia la recuperación, pero la determinación y la solidaridad de la comunidad son clave en estos momentos difíciles.