En medio de la intensa operación del ejército israelí para desmantelar a Hamas en Gaza, Donald Trump ha lanzado su "última advertencia" a este grupo islamista, instándolos a aceptar una propuesta de tregua que ya cuenta con el visto bueno de Israel.

Trump, a través de su red social Truth Social, expresó su deseo de que todos los rehenes regresen a casa y que la guerra llegue a su fin. "Los israelíes han aceptado mis condiciones. Es hora de que Hamas también las acepte", anunció mientras advertía sobre las consecuencias de no hacerlo.

Hamas, por su parte, ha respondido manifestando su disposición a discutir un acuerdo. En un comunicado, el grupo señaló que está listo para sentarse a la mesa de negociaciones, pero insistió en que no entregará sus armas como exige Israel.

La propuesta que se encuentra sobre la mesa, transmitida por el activista por la paz Gershon Baskin, implicaría la liberación de todos los rehenes capturados en el ataque del 7 de octubre a cambio de un número significativo de prisioneros palestinos. Además, se negociaría un cese de la operación israelí en Gaza.

Este plan incluiría una tregua permanente, supervisada personalmente por Trump, que se mantendría durante las negociaciones.

Desde el entorno del primer ministro Netanyahu, ha habido una evaluación seria de la propuesta de Trump, aunque persiste la negativa de Hamas. La pelota está ahora en el tejado de este grupo, que ya había mostrado previamente resistencia a diferentes propuestas de alto el fuego.

Trump no solo busca una solución a corto plazo, sino también establecer un acuerdo duradero que asegure la desmilitarización de Gaza y el regreso de todos los rehenes. Con el futuro de la región en juego, ¿aceptará Hamas esta última oportunidad, o se reafirmará su rechazo?