El president de Ucrania, Volodímir Zelenski, se ha reunido finalmente con Donald Trump en un encuentro que ha dejado más preguntas que respuestas. La fotografía del evento, llevado a cabo en la Torre Trump de Nueva York, revela la incomodidad del líder ucraniano mientras el ex presidente de EE.UU. prometía poner fin a la guerra en su país. Trump afirmó: “Tengo muy buena relación con el presidente Putin. Y creo que si ganamos [los republicanos], lo resolveremos rápido”. Esta es la primera vez que ambos se encuentran desde 2019.

Zelenski, visiblemente inquieto, teme que la llegada de Trump de nuevo a la Casa Blanca, en las elecciones del 5 de noviembre, ponga en peligro el futuro de Ucrania. Recientemente, Trump insinuó en un mitin en Carolina del Norte que Ucrania debería haber cedido territorio a Rusia antes de la invasión en 2022. Si bien el ex presidente ha manifestado que tiene una buena relación con Zelenski, este último parece dudar de su sinceridad, dado el historial de Trump.

En una declaración sorprendente, Trump expresó su respeto por Zelenski: “Es un honor tener al presidente con nosotros, y ha pasado por mucho”. Sin embargo, su apoyo a Zelenski contrasta con sus anteriores críticas. Esta contradicción ha dejado a muchos analistas cuestionando la verdadera postura de Trump respecto al conflicto.

La última interacción entre Zelenski y Trump ocurrió también durante la Asamblea General de Naciones Unidas, un momento tenso en el que los demócratas iniciaron el primer impeachment contra Trump. En esa ocasión, Trump había presionado a Zelenski para investigar a Joe Biden y su hijo Hunter, lo que había generado un escándalo mediático y político en Estados Unidos.

Estados Unidos sigue siendo el principal aliado de Ucrania, crucial para resistir la invasión rusa iniciada en febrero de 2022. Por esta razón, el resultado de las elecciones del 5 de noviembre no solo podrá determinar el futuro político de Estados Unidos, sino también el de Ucrania. Zelenski ha buscado activamente reuniones con Trump, Biden y la candidata demócrata Kamala Harris, entendiendo la necesidad de asegurar asistencia militar y económica continua.

Durante su encuentro con Trump, Zelenski presentó su “plan de la victoria para Ucrania”, que tiene como objetivo fortalecer la posición de Kiev en futuras negociaciones con Moscú. Aunque los detalles del plan son escasos, se espera que incluya peticiones para aumentar la ayuda militar y fortalecer las garantías de seguridad del país.

A pesar de las promesas de Trump de actuar rápidamente para resolver el conflicto si gana las elecciones, la historia sugiere que su administración podría tener su propia agenda política. En el pasado, Trump instigó a los sectores más radicales de su partido para que bloquearan durante meses un paquete de ayuda de 61.000 millones de dólares para Ucrania, que solo se desbloqueó cuando el conflicto en Israel adquirió relevancia.

En contraste, Biden ha sido rápido en garantizar a Zelenski una aceleración en la ayuda. “He ordenado al Pentágono que asigne todos los fondos restantes de asistencia en seguridad que han sido destinados a Ucrania, antes del final de mi mandato”, afirmó en su última reunión con Zelenski.

Sin embargo, uno de los mayores obstáculos sigue siendo la solicitud de Ucrania para usar misiles de largo alcance contra objetivos dentro de Rusia. Mientras Biden ha autorizado ataques con artillería occidental cerca de la frontera rusa, se ha mantenido reticente a permitir que Ucrania cruja esa línea, temiendo una escalada del conflicto por parte de Putin. Las siguientes semanas serán clave para el destino de Ucrania y su lucha por la soberanía.