El Banco Sabadell ha tomado una decisión que ha conmocionado a la política y la economía en Cataluña y en toda España: regresa su sede social a Barcelona tras haber sido trasladada a Alicante durante el tumultuoso proceso independentista. Esta noticia ha coincidido con la visita a Fitur en Madrid del president de la Generalitat, Salvador Illa, quien celebró el retorno de la entidad financiera, afirmando: “Es una buena noticia, estamos contentos de que se haya producido. Esto confirma que estamos en el buen camino.”

La vuelta del Banco Sabadell, dirigida por Josep Oliu, ha sido recibida con entusiasmo no solo en el ámbito político, sino también por instituciones como el Colegio de Economistas y la patronal Foment del Treball. Su presidente, Josep Sánchez Llibre, anticipa que otras “empresas relevantes” también podrían regresar en los próximos meses, reforzando la idea de que la confianza en la económica catalana está en aumento.

Illa destacó que “el buen camino es el camino del buen gobierno, de la estabilidad institucional y de la seguridad jurídica”. Este regreso no solo implica un cambio de sede, sinó que también representa una recuperación de la confianza en Cataluña, donde muchas empresas se vieron obligadas a irse en el pasado debido a la inestabilidad política. En los últimos años, numerosas empresas, como Laboratorios Ordesa y la tecnológica Red Points, han anunciado su regreso, lo que parece indicar un cambio positivo en el clima empresarial.

La reacción desde el Partido Popular también ha sido favorable, aunque reconocen que aceptar este éxito implica dar la razón a sus adversarios políticos. “Es positivo que las empresas que se fueron vuelvan a Cataluña. Así lo reclamaba en campaña y hoy lo mantengo. Ahora quedan 7.999 por volver”, comentó el líder de los populares catalanes en la red X.

En el mundo económico, la noticia se ha recibido con entusiasmo general. La vuelta del banco al territorio catalán se considera un símbolo del renacer de la confianza, y todos los ojos están ahora puestos en los movimientos de otras grandes entidades, como CaixaBank y el holding Criteria, que podrían seguir el mismo ejemplo.

El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha indicado que el regreso del Banco Sabadell se debe a que “la situación que había para que se fuera ha desaparecido”. Esta declaración sútilmente insinúa que otros bancos y compañías podrían ver en este cambio una oportunidad para evaluar su permanencia en Cataluña. Javier Pacheco, de CC OO, espera que esta tendencia sirva como incentivo para atraer nuevas inversiones y motive a otras empresas a regresar, finalizando así un capítulo que parecía largo y complicado en la historia empresarial de la región.