
Someterse o desafiar al gigante nazi: La valiente decisión de Pau Casals
2025-05-02
Autor: Laura
Una historia de valentía y sacrificio en tiempos oscuros
En 1943, el célebre músico Pau Casals se encontraba exiliado en el sur de Francia, lejos de la brutalidad del régimen franquista en España. Pero la ocupación nazi en Francia le presentaba un nuevo horror. A pesar de su precariedad, Casals decidió dedicar sus esfuerzos a ayudar a miles de españoles que sufrían en condiciones inhumanas, enfrentándose a un dilema moral que cambiaría su vida.
La inquietante invitación a tocar para Hitler
Un día, Casals recibió una aterradora invitación: tocar ante Adolf Hitler. Sabía que rechazarla podría acarrearle consecuencias devastadoras. Este dilema, entre el deber y la ética, es el núcleo de 'Música para Hitler', una obra escrita por Yolanda García y dirigida por Juan Carlos Rubio, que explora la complejidad del alma de uno de los más grandes artistas del siglo XX.
Drama en el escenario del Teatro Romea
La representación dramatiza el crucial momento en el que soldados nazis visitan Villa Colette, donde Casals residía en Prades, exigiendo su actuación. La tensión en el escenario no solo refleja el riesgo inminente para su vida, sino también la posibilidad de daño a las dos mujeres más importantes en su vida: su esposa y su sobrina. La obra plantea una profunda reflexión sobre la ética y los principios personales.
El conflicto de Johann: un reflejo del dilema de Casals
A través de personajes como Johann, un violonchelista convertido en soldado, la obra indaga en la lucha entre la admiración por su ídolo, Casals, y su deber militar. Este dilema, aunque ficticio, resuena poderosamente con la audiencia, tal como lo señala Rubio: en el teatro, hasta los más pequeños detalles cuentan.
¿Someterse o plantar cara?
La obra plantea una pregunta universal: ¿es mejor someterse o desafiar? Casals, en 1943, eligió desafiar. En palabras de Rubio, el momento actual nos invita a tomar decisiones simbólicas para rechazar la barbarie. Un 'no' en el momento adecuado puede cambiar el rumbo de una guerra. Este sábado, el escenario se llenará de un mensaje poderoso: enfrentarse al gigante puede ser una declaración de resistencia, una lucha por la dignidad y la libertad.