Siemens Energy ha estado en una racha impresionante, con un aumento del 227% en su valor de acciones este año. Sin embargo, la reciente victoria de Donald Trump ha generado inquietud entre los inversores de energías renovables debido a su postura crítica sobre el cambio climático. A pesar de esto, la mayoría de los analistas continúan viendo un gran potencial en la compañía, con el 44% de las recomendaciones sugiriendo comprar y otro 44% sugiriendo mantener sus acciones. El 12% restante aconseja vender, pero esto puede ser un error considerando su reciente desempeño en el mercado.

La preocupación principal gira alrededor de la valoración actual de Siemens Energy, que ha superado ampliamente las estimaciones de los analistas, con un precio objetivo del consenso del mercado de 35,2 euros. En un informe reciente, Deutsche Bank ha intentado desentrañar esta situación, señalando que 'la percepción sobre Siemens Energy está transformándose; de ser vista como un actor disruptivo por la transición energética, a convertirse en un líder en electrificación y descarbonización'. Este cambio de percepción ha sido impulsado por un aumento notable en la demanda de energía, especialmente por parte de los centros de datos que alimentan las aplicaciones de inteligencia artificial.

De acuerdo con Deutsche Bank, la empresa está excepcionalmente posicionada para capitalizar un superciclo de inversión en electrificación, y como resultado, han elevado su precio objetivo de 38 euros a 43 euros, un incremento del 10%. Morgan Stanley también se muestra positivo, apuntando que el consenso no ha valorado adecuadamente el potencial de expansión de márgenes en sus divisiones de gas y tecnologías de red.

Mientras tanto, Bank of America destaca la importancia de Siemens Energy en la transición hacia la energía sostenible, aunque reconoce que Siemens Gamesa enfrenta retos significativos. Aunque se han superado algunas incertidumbres del año pasado, el camino hacia la rentabilidad es lento y complicado, especialmente en el sector onshore.

Durante los primeros nueve meses del ejercicio fiscal de 2024, Siemens Energy reportó un beneficio de 1.588 millones de euros, en stark contrast con las pérdidas históricas de 3.718 millones en el mismo periodo del año anterior, en gran parte debido a los problemas en los aerogeneradores de Siemens Gamesa.

Por otro lado, Barclays tiene una perspectiva mucho más conservadora, valuando a Siemens Energy en solo 21 euros. Argumentan que, aunque las ganancias en su división de gas y energía han mejorado, las condiciones del mercado son desafiantes y el múltiplo de valoración se ha duplicado en los últimos seis meses.

Además, Morningstar considera que las acciones están sobrevaloradas y no descarta la incertidumbre en el negocio de turbinas eólicas. La rentabilidad futura dependerá de la recuperación de Siemens Gamesa y de la magnitud de cualquier pérdida adicional relacionada con sus turbinas defectuosas, estableciendo un valor razonable en 24 euros.

Así que, mientras Siemens Energy navega por un mar de incertidumbres, muchos inversores se preguntan si la inteligencia artificial será el viento que sople a su favor en los próximos años. ¿Está realmente la inteligencia artificial dando un nuevo soplido de vida a Siemens Energy? ¡Solo el tiempo lo dirá!