El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha hecho un llamado poderoso este miércoles para fomentar la paz en Palestina y Líbano, instando ante la Asamblea General de la ONU a aplicar de manera "urgente" la solución de dos Estados, como un paso esencial hacia la resolución del conflicto en Oriente Medio.

En su discurso, Sánchez describió la "insoportable espiral de muerte y devastación" que afecta a Palestina, que se ha intensificado recientemente con bombardeos israelíes en Líbano. "Este aumento de la violencia es sumamente grave", alertó, enfatizando la necesidad de un alto el fuego y condenando la muerte de civiles inocentes.

"Las evidencias son claras: no podemos permitir un regreso a la situación anterior. La única forma de avanzar es implementando la solución de dos Estados donde Israel y Palestina coexistan en paz y seguridad. Este conflicto ha perdurado durante décadas y ha cobrado un alto precio en términos de vidas", señaló Sánchez con firmeza.

El presidente también manifestó su apoyo decidido a la Autoridad Palestina, indicando que España está "comprometida y decidida a fortalecer" el gobierno palestino, subrayando el reconocimiento formal del Estado de Palestina el 28 de mayo y anunciando una reunión intergubernamental prevista para finales de este año.

Además, Sánchez anunció que España incrementará en al menos un 25% su financiación a Naciones Unidas en el periodo 2025-2027, subrayando que "trabajar por la paz es mucho más que una exigencia moral".

En su intervención, el presidente destacó la "enorme presión" que enfrenta el sistema multilateral actualmente, mencionando un aumento de conflictos globalmente y el impacto devastador que esto tiene en la paz, la democracia y el desarrollo.

"Debemos recordar que la paz sin democracia es una paz ficticia y la democracia sin desarrollo es el camino hacia la autocracia. Este es un momento crítico para actuar," manifestó Sánchez. También advirtió sobre el posible retroceso democrático en varias naciones, señalando que hay una lucha constante por la supervivencia de las democracias frente a agendas reactivas que crecen alrededor de la desconfianza institucional.

El presidente no pasó por alto la guerra en Ucrania, que ha estado en curso por más de dos años y medio, invitando a todos a unirse a los esfuerzos por una "paz justa y duradera", y anunció que España incrementará su financiación humanitaria y destinada al desminado hasta alcanzar los 14 millones de euros.

Finalmente, también abogó por la situación en Venezuela, demandando respeto por la voluntad del pueblo venezolano y transparencia en los procesos electorales. "Reitero el compromiso inquebrantable de España por la democracia y los derechos humanos en Venezuela", concluyó.

Sánchez cerró su discurso abordando las negociaciones sobre Gibraltar tras el Brexit, asegurando que tanto España como el Reino Unido están trabajando arduamente para alcanzar un entendimiento bilateral que respete la doctrina de las Naciones Unidas, reiterando la posición de España sobre la soberanía y jurisdicción de este territorio.