En un momento clave para la diplomacia internacional, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha destacado la figura del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, como un mediador fundamental en los conflictos de Oriente Próximo y Ucrania. Durante su reciente visita a Estambul, Sánchez subrayó la importancia estratégica de Turquía para las empresas españolas, reflejando un interés renovado en las relaciones económicas entre ambos países.

La estancia de Sánchez en Estambul coincide con la cumbre de la Internacional Socialista, que preside desde hace tres años, convirtiéndose en el primer español en liderar dicha organización. Este encuentro será el escenario donde Sánchez articulará su mensaje a sus pares internacionales, enfatizando la necesidad de un enfoque colaborativo para abordar crisis humanitarias.

Además, Sánchez ha presentado ante la Asamblea General de las Naciones Unidas una resolución que busca poner fin al bloqueo israelí de ayuda humanitaria en Gaza. Esta semana, la ayuda ha empezado a fluir, aunque en pequeñas cantidades, dando esperanzas a miles de civiles afectados por la situación.

Tensión entre España e Israel

La visita se produce en un contexto de creciente tensión entre el Gobierno español y el de Israel. Desde la controvertida visita de Sánchez a la zona en conflicto tras el atentado de Hamás en octubre de 2023, las relaciones han sido tensas. El pasado fin de semana, durante la cumbre de la Liga Árabe en Bagdad, Sánchez no dudó en criticar nuevamente al Gobierno de Benjamin Netanyahu por supuestas violaciones a los derechos humanos en Gaza.

Además, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, protestó enérgicamente tras un ataque del Ejército israelí en Cisjordania, que afectó a una comitiva diplomática de treinta países, incluyendo a un funcionario español. Este acto ha llevado al país a convocar al encargado de negocios israelí, en un momento en el que la embajada de Israel en Madrid carece de embajador tras la salida de la última representante.

Con este trasfondo, la invitación a Erdogan para participar el próximo julio en una Conferencia Internacional de Financiación para el Desarrollo en Sevilla subraya la búsqueda constante de España por un liderazgo activo en la solución de problemas globales.