Un equipo internacional de investigadores ha realizado ensayos in vitro sorprendentes utilizando células de hepatoblastoma de alto riesgo tomadas de pacientes. Los resultados son asombrosos: el fármaco panobinostat ha mostrado una capacidad excepcional para reducir drásticamente la proliferación de las células cancerosas. Este efecto se ha observado no solo en cultivos celulares convencionales, sino también en esferoides tumorales, donde el fármaco indujo una muerte celular notable. Sorprendentemente, panobinostat demostró ser diez veces más efectivo en tumores impulsados por el oncogén MYC en comparación con aquellos muchos más comunes que son provocados por K-Ras.

Roland Kappler, un destacado científico de la Universidad Ludwig Maximilians y codirector del estudio, explica que estos resultados se alinean perfectamente con el mecanismo de acción de panobinostat, que actúa como un inhibidor de las histona-deacetilasas. Estas enzimas, que tienen un aumento en su actividad en el hepatoblastoma metastásico, son cruciales para la progresión del cáncer. Además, en un modelo que simula metástasis pulmonares, los investigadores observaron la eliminación del compartimento tumoral en tan solo 48 horas.

La investigación no se detiene aquí. En un siguiente paso, se realizó una simulación de ensayo clínico, y se descubrió que la adición de panobinostat al régimen de tratamiento basado en doxorrubicina y cisplatino produce un efecto sinérgico, incluso con dosis muy bajas de estos compuestos tradicionales. Esto abre la puerta a nuevas posibilidades terapéuticas en la lucha contra el hepatoblastoma metastásico, un tipo de cáncer que ha sido desafiante de tratar hasta ahora. Los expertos están ansiosos por ver cómo estos hallazgos pueden traducirse en procedimientos clínicos seguros y efectivos para pacientes jóvenes que enfrentan esta dura batalla.