Recientemente, un consorcio de innovadoras empresas denominado Turbotech, junto con Safran y Air Liquide, ha dado un paso significativo en la transición hacia una aviación más sostenible al probar con éxito un motor de turbina alimentado por hidrógeno líquido.

El uso del hidrógeno como fuente de energía alternativa está marcando la pauta en la industria de la aviación con un claro objetivo: reducir las emisiones de carbono de los vuelos comerciales. A lo largo de 2024, diferentes investigaciones, como el motor superconductor para aeronaves desarrollado por Airbus y Toshiba, así como una turbina de hidrógeno de Universal Hydrogen, ya estaban en el centro de la atención.

Este avance reciente es un hito histórico, ya que representa la primera vez que se utiliza hidrógeno en un motor de turbina diseñado específicamente para aviones ligeros. La colaboración entre Safran, Turbotech y Air Liquide ha permitido que los avances en tecnología de propulsión avancen rápidamente.

El CEO de Turbotech, Damien Fauvet, afirmó que este proyecto es un hito en la búsqueda de una propulsión completamente descarbonizada para aviación, apuntando a que pronto las aeronaves podrán volar utilizando hidrógeno verde producido en masa.

Xavier Traversac, vicepresidente de Air Liquide Advanced Technologies, expresa con entusiasmo que el hidrógeno es un pilar fundamental de la transición energética, haciendo de esta innovación un paso más hacia el vuelo de bajo impacto ambiental.

La prueba más contundente de esta investigación tuvo lugar el 11 de enero de 2024, cuando se realizó una exitosa demostración del motor TurboTechants TP-R90, diseñado para aviones de 2 a 7 plazas, con gas hidrógeno. Este experimento es parte del proyecto BeautHyFuel, el cual busca explorar las posibilidades del hidrógeno en la aviación ligera.

El 13 de enero de 2025, esta colaboración culminó con el exitoso ensayo de un motor de turbina alimentado por hidrógeno líquido, una hazaña que marca un antes y un después en la historia de la aviación. Con el apoyo de la Autoridad de Aviación Civil Francesa, la prueba confirmó que es posible contar con un sistema de propulsión que no emita carbono durante el vuelo.

Pierre-Alain Lambert, vicepresidente de Programas de Hidrógeno de Safran, explicó que al combinar su tecnología con el sistema de almacenamiento criogénico de Air Liquide, han mostrado que es viable implementar sistemas de propulsión de alta tecnología y cero emisiones en aeronaves ligeras.

Este significativo avance no solo promete un futuro más limpio y verde para laaviación, sino que también despierta expectativas sobre cómo estas tecnologías pueden aplicarse a vuelos comerciales regulares en un futuro cercano. ¡La aviación del mañana podría ser más sostenible de lo que jamás imaginamos!