En una sorprendente vuelta de tuerca, la Ejecutiva provincial del PSOE de Jaén ha decidido este lunes apoyar de manera contundente a Juan Francisco Serrano como candidato para ocupar la Secretaría General del PSOE de Andalucía, un puesto que estaba vacante tras la salida de Juan Espadas. Esto marca un cambio significativo, ya que Jaén era la última agrupación que mantenía el silencio mientras aguardaba la aprobación del calendario del 15º Congreso Regional del PSOE de Andalucía, un proceso que finalizó el pasado viernes.

Juan Francisco Serrano, de tan solo 36 años, ha sido un rostro clave dentro del partido, actuando como adjunto a Organización de la Ejecutiva federal y mano derecha de Santos Cerdán. Originario de Bédmar, ha tenido una carrera política brillante como alcalde y actualmente se le reconoce por ser una figura de confianza para el secretario provincial, Paco Reyes, quien ha sido el principal impulsor de su candidatura. Este apoyo también ha sido respaldado por Jacinto Viedma, ex secretario de Organización del PSOE de Andalucía, lo que le otorga un respaldo significativo dentro de la estructura del partido.

A pesar de la clara disposición de la agrupación jiennense a apoyar a Serrano, ambos, Reyes y Viedma, han insistido en que no hay un apoyo formal hacia ningún candidato, tal como explicaron en una reciente nota de prensa. Un hecho sorprendente, dado el respaldo que Serrano ha comenzado a recibir dentro y fuera del partido, posicionándose así como un fuerte contendiente en la carrera hacia la Secretaría General.

Además de la estrategia de apoyo, la reunión también culminó en una comida navideña donde se observó la camaradería entre los miembros, con Serrano uniendo la mesa en el postre, un gesto simbólico que refuerza su creciente influencia.

La importancia de este respaldo radica en que es la primera vez que la Ejecutiva de Jaén realiza una apuesta tan explícita por un candidato; anteriormente, el secretario general había optado por no posicionarse, preservando así una neutralidad estratégica hasta ahora. Sin embargo, muchos observadores sienten que este movimiento podría poner a Serrano a la cabeza de la contienda por la Secretaría General, justo en un momento crítico para el PSOE andaluz, que busca renovarse después de la tumultuosa etapa de Juan Espadas.

En medio de este panorama, la figura de María Jesús Montero, actual vicepresidenta primera del Gobierno, sigue flotando en la conversación. Se considera que su posible candidatura podría ser la única opción para mantener la unidad del partido y evitar unas primarias que, según muchos, reabrirían heridas profundas de luchas internas pasadas. Sin embargo, hay quienes advierten que depender demasiado de Montero podría ser un error monumental que refleja la incapacidad del PSOE andaluz para consolidar un liderazgo sólido y colectivo.

En resumen, con el apoyo de la Ejecutiva de Jaén, Serrano se posiciona como un candidato de peso en la arena política andaluza, en un momento donde la cohesión del partido es más crucial que nunca. La pregunta en el aire ahora es: ¿se atreverá a lanzar su candidatura oficial, y podrá aglutinar el apoyo necesario para encabezar el futuro del PSOE en Andalucía?