Los ordenadores cuánticos están a punto de transformar nuestra realidad, pero para alcanzar su máximo potencial, necesitamos procesadores cuánticos más potentes que nunca. ¿Cómo planean los científicos llevarlos a nuevas alturas?

Conocidos como el futuro de la computación, los ordenadores cuánticos están diseñados para realizar cálculos complejos en un tiempo que parece imposible de alcanzar con la tecnología actual. Se espera que revolucionen campos como la física, la química, la inteligencia artificial e incluso la seguridad en internet. Aunque ya existen modelos en el mercado, la mayoría de ellos apenas alcanzan unos 1.000 qubits, muy lejos de la meta de millones necesarios para desatar todo su poder.

La solución radica en entrelazar los qubits de forma eficiente. Cada qubit opera a una frecuencia específica, y para maximizar el rendimiento de un dispositivo cuántico, es fundamental sintonizar estas frecuencias. La sincronización y el emparejamiento de millones de qubits es esencial para conseguir el entrelazamiento cuántico, un fenómeno en el que un qubit influye instantáneamente en otro, sin importar la distancia entre ellos.

Para lograr esto, se propone introducir frecuencias adicionales en cada qubit, lo que les permitirá operar con dos frecuencias: una para el control y otra para el emparejamiento. Esta innovadora técnica, denominada "aplicación de voltajes oscilantes", ha sido propuesta por destacados investigadores en un estudio reciente publicado en PRX Quantum.

Además, la clave para conectar y alinear las frecuencias radica en el uso de fotones especiales de cavidad de microondas, capaces de gestionar diferencias en las frecuencias y facilitar la comunicación entre qubits. Este avance es visto como un rayo de esperanza en el camino hacia una tecnología cuántica más avanzada y efectiva.

Según Vanita Srinivasa, uno de los autores del estudio, las pruebas continuarán en los laboratorios, mostrando que estamos más cerca que nunca de fabricar dispositivos cuánticos que puedan resolver problemas que las computadoras más poderosas del mundo no pueden gestionar.

En un ejemplo del potencial descomunal de esta tecnología, Google ha desarrollado un ordenador cuántico capaz de llevar a cabo en segundos lo que otros sistemas tardarían 47 años. Sin embargo, la mayoría de estos dispositivos aún no han alcanzado toda su capacidad.

La carrera hacia el desarrollo de ordenadores cuánticos más avanzados está en marcha, y con estos nuevos hallazgos, el futuro de la computación podría estar más cerca de lo que imaginamos. ¡No te pierdas los siguientes capítulos de esta fascinante historia que promete cambiar el mundo tal y como lo conocemos!