Más de una docena de municipios en Valencia continúan sin suministro de gas casi una semana después de la trágica riada que devastó diversas comarcas el 29 de octubre. Los municipios afectados incluyen Alfafar, Benetúser, Catarroja, Chiva, Cheste, Massanasa, Paiporta, Utiel, Albal, Loriguilla, y los polígonos industriales de Ribarroja. Esta falta de suministro afecta gravemente a las cocinas de gas y calentadores, dejando a muchas familias sin agua caliente y sumergidas en serias dificultades.

Según Nedgia, parte del grupo Naturgy, «por razones de seguridad hemos tenido que cerrar el suministro de gas en algunos municipios afectados, hasta poder realizar una revisión rigurosa de las instalaciones». Además, se incluyen en el informe a Monserrat, Sedaví, Utiel, Picanya y Loriguilla, que también se encuentran en esta lista de municipios sin gas.

Mientras tanto, el restablecimiento de la red de saneamiento y el suministro de agua avanza; se han enviado cerca de cien fontaneros para reparar las acometidas de la red general a edificios particulares. Aunque todas las áreas afectadas cuentan ahora con servicio de agua potable, este no es apto para el consumo humano y solo se puede utilizar para aseo y limpieza. Equipos de la Conselleria de Sanidad están analizando la calidad del agua mientras se realizan trabajos de reconstrucción en las plantas depuradoras.

En el ámbito de la electricidad, Iberdrola reporta que el 95% del suministro ha sido restablecido, aunque persisten problemas en algunas áreas donde las instalaciones privadas siguen dañadas.

El despliegue de ayuda es significativo: alrededor de 5,000 efectivos militares y aproximadamente 2,100 medios técnicos están trabajando en la recuperación. Además, más de 1,700 efectivos de los consorcios provinciales de bomberos, Bomberos Forestales de la Generalitat y Protección Civil, junto a más de 300 bomberos de otras comunidades, están combatiendo la crisis.

Es importante tener en cuenta que la situación sigue siendo crítica en las áreas afectadas y las autoridades están trabajando incansablemente para restablecer todos los servicios lo más pronto posible. La solidaridad entre los valencianos se hace más evidente en estos momentos difíciles, donde muchos se ofrecen como voluntarios para ayudar a aquellos que lo han perdido todo.