Hace casi un año, concretamente 363 días, el Villarreal dio la campanada al vencer al Barcelona en Montjuic, lo que significó un renacer para un equipo que coqueteaba con el descenso. Desde entonces, los de Marcelino no han logrado volver a derrotar a ningún equipo grande. De los diez primeros en LaLiga, solo han conseguido ganar al Mallorca. Sin embargo, han estado a punto de lograr victorias importantes, solo que pequeños detalles, como goles anulados por el VAR, han frustrado sus esfuerzos.

La fragilidad defensiva del Villarreal, que promedia más de un gol y medio en contra por partido, ha sido un factor que ha contribuido a esta sequía de triunfos. A lo largo de este año, les falta esa victoria celebrada con entusiasmo, la que eleva el espíritu del equipo y de la afición. Sin embargo, el partido de hoy contra el Atlético de Madrid, el mejor equipo de LaLiga en casa y que aún no ha perdido en su estadio, representa una posible oportunidad de cambio. A su favor, el Villarreal presenta una tarjeta de visita como visitante impresionante, con cinco victorias en su haber.

Además, el equipo ha recuperado un estilo ofensivo más dinámico, caracterizado por un ataque vibrante, con jugadores destacados como Barry, Ayoze, Gerard, Baena y Pino. Esta participación activa de las nuevas estrellas ha sido una gran noticia, lo que proporciona un aire fresco al ataque del Submarino Amarillo. No hay que pasar por alto el importante regreso de Juan Foyth, que suma solidez a la defensa. ¿Podrá el Villarreal, esta vez, romper la racha y conquistar a uno de los gigantes de LaLiga? La temporada está lejos de terminar y la esperanza renace en cada partido.