En medio de un entorno cada vez más complejo y tensado por las sanciones impuestas por Estados Unidos y otros aliados, el General en Jefe del Ejército, Vladimir Padrino López, ha reafirmado su compromiso a favor del régimen de Nicolás Maduro. En un comunicado respaldado por el GJ Domingo Hernández Lárez, quien lo llamó "Comandante en Jefe" en un discurso que se tornó muy controversial, Padrino asegura que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) no se dejará amedrentar por las acciones externas.

Estados Unidos ha colocado una recompensa de 15 millones de dólares por información que conduzca a la captura de Padrino, quien es acusado de estar vinculado al narcotráfico. Esta recompensa se une a la de 25 millones ofrecidos por la captura de Maduro y Diosdado Cabello, una suma que los críticos comparan con aquellas otorgadas por líderes terroristas como Osama bin Laden.

Las sanciones han provocado que los comandantes de las Regiones de Defensa Integral (REDI) fueran instados a pronunciarse en video, denunciando estas medidas, y proclamando fidelidad absoluta a Maduro y Padrino, insistiendo en la supuesta fortaleza de la unidad militar ante la adversidad.

“Esta agresión fortalece la cohesión y unión de nuestra institución militar”, expresó Hernández Lárez, enfatizando que las sanciones están motivadas por un intento de desacreditar el liderazgo nacional. Esta lealtad inquebrantable se manifiesta en momentos en que el país se siente acorralado por lo que los líderes consideran una guerra económica y mediática.

El discurso también incluyó menciones sobre la valentía del gobierno bolivariano en la lucha contra el narcotráfico, presentando a Maduro como un líder fuerte y efectivo desde 2013. A pesar de las críticas y las fuertes sanciones internacionales, Hernández Lárez y Padrino califican estas acciones como parte de un plan neofascista que busca desestabilizar al país, resaltando su intención de resistir ante cualquier presión externa.

Padrino, en respuesta a la expresión de apoyo de Hernández Lárez, agradeció la demostración de solidaridad, subrayando que la FANB está cohesionada y consciente del momento histórico que enfrenta Venezuela. “Nos mantenemos firmes, sin quebrarnos ante sanciones ni chantajes”, aseguró, reiterando el compromiso de la institución militar con la defensa de la soberanía nacional. Con un mensaje de determinación, concluyó que “aquellos que se atreven a cuestionar nuestra integridad, enfrentarán la unidad de un ejército comprometido”.

Cabe resaltar cuán crucial es este momento para el chavismo, donde incluso las manifestaciones de lealtad pueden ser consideradas como una defensa ante lo que perciben como una amenaza existencial contra su liderazgo y su propuesta de gobernanza. Las tensiones cada vez más pronunciadas entre el chavismo y el imperialismo global crean un panorama en el que las palabras y las acciones del gobierno se vuelven más significativas para su base de apoyo.