Deportes

Ocho ultras del Anderlecht arrestados tras disturbios en el Reale Arena que interrumpieron el partido

2024-10-03

Incidente violento en el Reale Arena

El comportamiento violento de los ultras del Anderlecht causó una interrupción significativa en el partido de la Europa League que se estaba llevando a cabo en el Reale Arena. Alrededor del minuto 35, los aficionados radicales rompieron el cristal protector que los separaba del resto de la afición y comenzaron a lanzar objetos al campo. Esto llevó al portero de la Real Sociedad, Álex Remiro, a solicitar la detención del encuentro, ya que temía por su seguridad.

Detenciones y cargos

Las autoridades vascas han confirmado que ocho ultras fueron detenidos en la misma grada de los aficionados belgas, justo después de las ocho de la tarde. Uno de ellos fue arrestado por atentado a la autoridad, mientras que los otros enfrentan cargos por desórdenes públicos, daños y resistencia a la policía.

Impacto en el partido

El colegiado esperó un par de minutos tras el incidente, justo después de que el Anderlecht había logrado empatar el partido. Esta situación desestabilizó al equipo local, que cedió un segundo gol al visitante, celebrando la afición belga con el canto del 'Viva España'. Ante la creciente tensión, la Ertzaintza intervino para acordonar la primera fila de la grada.

Tensiones previas al partido

Los problemas comenzaron desde el traslado de los ultras al estadio, que aunque fue relativamente pacífico, estuvo marcado por tensiones en San Sebastián, donde se escucharon insultos entre hinchas locales y visitantes. Durante su recorrido hacia el estadio, los ultras realizaron lanzamientos aislados de petardos, bengalas y botes de humo, generando una atmósfera aún más hostil.

Advertencias de las autoridades

Desde días antes, las autoridades vascas habían emitido advertencias instando a la prudencia, recomendando a bares y restaurantes que retiraran sus terrazas y a los centros educativos que cerraran anticipadamente. Los ultras del Anderlecht son conocidos como uno de los grupos más peligrosos de Europa, lo que aumentó las preocupaciones sobre el evento.

Enfrentamientos con la policía

A pesar de que el ambiente había permanecido relativamente tranquilo durante el día, surgieron varios enfrentamientos con la Ertzaintza mientras los aficionados se acercaban al Reale Arena. La marcha de los ultras tuvo que detenerse durante diez minutos, lo que llevó a algunos comercios a bajar sus persianas ante la posible violencia. La policía desplegó varios furgones para mantener el control y evitar que el grupo se fragmentara.

Conflictos en el estadio

Ya al llegar al estadio sobre las 17:30 horas, se registraron nuevos enfrentamientos con aficionados de la Real Sociedad, lo que llevó a la Ertzaintza a prohibir el acceso a los hinchas realistas. A pesar de esta medida, algunos seguidores locales no pudieron evitar acercarse y confrontar a los belgas, reflejando la tensión que caracterizó el encuentro.