Con el comienzo de un nuevo año, muchas personas sienten el impulso de adoptar hábitos más saludables, y el ejercicio físico suele encabezar la lista de propósitos. Sin embargo, siempre existe el interrogante: ¿hay un momento en la vida en el que ya no se puede empezar? Un reciente estudio publicado en la revista Aging Cell aporta respuestas significativas.

Según Casper Søndenbroe, uno de los investigadores detrás del estudio, la pérdida de células motoras, cruciales para la movilidad, comienza alrededor de los 70 años. Este hallazgo es crucial, ya que indica que el ejercicio regular puede retrasar este deterioro, otorgando una oportunidad para mantener la vitalidad en la vejez.

¡Actívate y Preserva Tu Movilidad!

Las células motoras son neuronas encargadas de transmitir señales desde el cerebro y la médula espinal hacia los músculos, permitiendo así el movimiento voluntario. Con el paso del tiempo, especialmente a partir de los 70 años, la cantidad de estas células disminuye, lo que puede impactar negativamente en la calidad de vida y la movilidad.

No obstante, el estudio en Aging Cell sostiene que la actividad física regular puede no solo mitigar esta pérdida, sino también preservar la función neuromuscular. Además, investigaciones anteriores han demostrado que el ejercicio físico promueve la hipertrofia en la unión neuromuscular y acelera su remodelación en personas mayores, lo cual podría contrarrestar la degradación muscular y la degeneración neuromuscular.

¡Es Muy Tarde para Dejar de Moverte!

La creencia de que existe un límite de edad para comenzar a hacer ejercicio está siendo desmentida por la creciente evidencia científica. La pérdida de células motoras puede comenzar a partir de los 70 años, pero eso no quiere decir que el ejercicio sea ineficaz o que no se deba practicar después de esa edad.

De hecho, permanecer activo puede incrementar la fuerza muscular, mejorar el equilibrio y la coordinación, lo cual contribuye a una calidad de vida más alta. Es fundamental que cualquier actividad física sea adaptada a las capacidades y circunstancias individuales de cada persona.

Se recomienda incorporar ejercicios de fortalecimiento dos o tres veces a la semana, complementados con actividades aeróbicas moderadas. La clave está en la constancia y en consultar siempre a un profesional de la salud antes de iniciar cualquier programa de ejercicios.

Los Beneficios de Ser Activo

La ciencia respalda que nunca es demasiado tarde para hacer ejercicio. La pérdida de células motoras asociada al envejecimiento puede ser mitigada con un programa de actividad física bien estructurado. Los beneficios son múltiples:

- **Mejora Cardiovascular:** El ejercicio fortalece el corazón y mejora la circulación. - **Control del Peso:** Ayuda a quemar calorías y mantener un peso saludable. - **Fortalecimiento Muscular y Óseo:** Actividades de fuerza y aerobics reducen el riesgo de osteoporosis. - **Reducción del Estrés:** Las endorfinas liberadas generan una sensación de bienestar. - **Mejora del Ánimo:** Reduce síntomas de depresión y aumenta la felicidad. - **Clareza Mental:** Mejora la función cognitiva y la memoria con el aumento del flujo sanguíneo cerebral. - **Sueño de Calidad:** Facilita conciliar el sueño, contrarrestando el insomnio.

No permitas que la edad sea un freno; ¡abraza el ejercicio y transforma tu vida en cualquier etapa!