Salud

Noelia Samartin, neurocientífica: 'Recomiendo hacer suspiros fisiológicos tres veces al día'

2025-01-27

Autor: José

Noelia Samartin, una destacada neurocientífica gallega, sostiene que la psicología y la neurociencia son dos disciplinas interconectadas. Para ella, cada consulta es más que un simple encuentro; es una oportunidad para explorar las razones que subyacen a los comportamientos y emociones de sus pacientes. "Cuando sugiero una rutina de meditación, es fundamental que la persona comprenda el 'por qué' detrás de esta práctica, ya que esto le ayudará a encontrar una motivación real más allá de la simple intención de empezar", explica.

Uno de los temas cruciales que aborda es el estrés. Según Samartin, vivimos en una sociedad donde el estrés ha alcanzado niveles alarmantes, pero existe un gran desconocimiento sobre sus funciones. "El estrés en sí no es negativo; es una respuesta natural del cuerpo frente a situaciones de miedo que nos mantiene alerta y activos. Sin embargo, el problema surgen cuando vivimos en un estado de continua alerta sin poder equilibrar estas reacciones con momentos de calma", añade.

En su análisis, destaca que no hay un único factor que desencadene el estrés, sino una combinación de elementos laborales, familiares, expectativas sociales y la omnipresencia de las redes sociales, que complican la desconexión y la relajación. Samartin apunta que, aunque las vacaciones ofrecen un respiro, el día a día nos atrapa en un ciclo de estrés difícil de romper.

Samartin recomienda implementar técnicas de respiración simples y efectivas. Uno de sus métodos favoritos es el suspiro fisiológico, que consiste en realizar tres pausas durante el día, preferentemente por la mañana, al mediodía y en la tarde. "Este ejercicio es innato; lo hacemos de manera intuitiva cuando nuestro cuerpo busca relajarse, como cuando estamos a punto de dormir o queremos calmar el llanto", explica. Este simple acto de respirar conscientemente puede ayudar a disminuir la activación de la amígdala, la parte del cerebro que procesa el miedo.

La neurociencia también sostiene que la atención plena es crucial para la salud mental. Samartin recomienda prácticas como la meditación, pero también actividades cotidianas, como caminar sin distracciones o ducharse prestando plena atención al agua y las sensaciones del cuerpo. Esto no solo ayuda a regular el estrés, sino que promueve una conexión más profunda con uno mismo.

Además, Samartin menciona que es fundamental reconocer que el ejercicio físico tiene un papel protector contra el estrés. Al practicar actividad física, nuestro cerebro libera sustancias que ayudan a calmar la amígdala. Sin embargo, enfatiza la importancia de elegir el tipo de ejercicio adecuado; no siempre es necesario un entrenamiento intenso. Incluso pequeñas actividades, como caminar durante media hora al día, pueden ser altamente beneficiosas.

Por último, la neurocientífica subraya la importancia de una buena gestión del tiempo y la planificación para evitar sobrecargas laborales y reducir la ansiedad. "Algunas personas sienten que ya están estresadas desde primera hora de la mañana. Establecer una agenda y cuidar la calidad del sueño son claves para un día más saludable y menos abrumador", concluye.

Los descubrimientos de Samartin son un recordatorio de que, en un mundo acelerado, prestar atención a nuestra salud mental y emocional es más crucial que nunca. Implementar prácticas sencillas como la respiración consciente puede ser el primer paso hacia una vida más equilibrada y saludable.