La doctora Nicole LePera, con formación en psicología clínica de la prestigiosa Universidad Cornell en Estados Unidos, ha dedicado años a ayudar a sus pacientes a afrontar traumas profundos y a romper ciclos de conductas nocivas. Durante su carrera, ha notado patrones disfuncionales en muchas de las personas que atiende, lo que les impide mantener relaciones saludables y satisfactorias. Sin embargo, no solo sus pacientes han enfrentado estos desafíos; al explorar su propia historia, se dio cuenta de que ella misma lidió con traumas que afectaron sus habilidades sociales.

Decidió entonces crear el espacio terapéutico #SelfHealers, dirigido a quienes buscan tomar control de su salud mental. Hoy, cuenta con más de nueve millones de seguidores en Instagram, donde su cuenta @the.holistic.psychologist ofrece recursos valiosos para quienes deseen estabilizar su vida emocional. En su próximo libro, 'Cómo ser el amor que buscas' (publicado por VR Europa en 2024), LePera proporciona herramientas para entender nuestro pasado y transformar nuestro futuro.

La doctora LePera explica cómo el apego, formado en la infancia, afecta nuestra vida adulta. La calidad de las relaciones iniciales, especialmente con quienes nos cuidan, modela nuestra capacidad para crear vínculos saludables más adelante. Si estos primeros lazos no son seguros, se activan respuestas de estrés en situaciones que recuerdan circunstancias de dolor o trauma. Esto puede llevar a una reacción emocional desproporcionada y a dificultades en las interacciones sociales.

Las reacciones comunes de un sistema nervioso mal regulado incluyen comportamientos impulsivos, aislamiento emocional y físicamente sentirse inquieto o fatigado. Ella menciona que es crucial reconocer las señales de alerta de nuestro cuerpo, como tensión muscular o cambios en el ritmo cardíaco, que indican que no nos sentimos seguros.

LePera también indica que regular el sistema nervioso es esencial. Una forma de lograrlo es identificando sensaciones que nos brindan calma y seguridad, así como aquellas que nos hacen sentir incómodos. Incorporar pequeños rituales de confort, como el uso de mantas suaves o recrear ambientes seguros, puede ser un buen comienzo.

Además, se enfatiza la importancia de buscar apoyo emocional en nuestro entorno. La comunicación clara sobre nuestras necesidades puede fortalecer las relaciones y permitir a otros brindar el soporte necesario. Por ejemplo, expresar de forma asertiva si necesitamos compañía o una pausa para reconectar con nosotros mismos puede ser fundamental.

El concepto de ‘asombro’, que LePera menciona, es crucial para el bienestar emocional. Esto no se limita solo a momentos extraordinarios, sino que se puede encontrar en la rutina diaria, como observar la naturaleza o practicar nuevas actividades. La conexión con el 'niño interior' también es fundamental; nutrir nuestra creatividad y emociones reprimidas puede traer una mayor alegría y conexión con nuestro propósito.

Finalmente, se abordan algunos aspectos sobre la alimentación. La forma en que comemos, como el hecho de hacerlo de pie o apresuradamente, puede tener un impacto en nuestro sistema nervioso y emocional. Crear un ambiente tranquilo durante las comidas permite una mejor digestión y bienestar emocional. Al adoptar hábitos que incluyan una alimentación consciente, no solo mejoramos nuestra salud, sino que también ayudamos a regular nuestras emociones.