Este domingo, Barcelona vivió una intensa manifestación donde miles de personas se congregaron en el centro de la ciudad para exigir el cese del 'genocidio' en Palestina. Los manifestantes pidieron al Gobierno español que rompa relaciones diplomáticas con Israel y que se detenga la venta de armas al país mismo.

Con el poderoso lema: 'Detengamos el genocidio en Palestina. Basta de comercio de armas con Israel', esta movilización se enmarca en una serie de protestas globales que conmemoran el primer aniversario del ataque de Hamás contra Israel, que dio inicio a una feroz ofensiva militar israelí en Gaza. Vista esta ola de solidaridad, muchos se preguntan: ¿será suficiente para influir en las decisiones políticas?

La manifestación comenzó en los Jardines de Gràcia y culminó en la emblemática plaza Catalunya. Los asistentes, en su mayoría portando banderas palestinas y el característico pañuelo kufiya, elevaron fuertes consignas, destacando: 'Boicot a Israel', '¿Dónde están, no se ven, las sanciones a Israel?', 'Israel asesina, Europa patrocina', 'Generalitat, prou complicitat' y 'No es una guerra, es un genocidio'. Estas palabras resonaron con fuerza, reflejando el profundo descontento entre los participantes.

Los organizadores de esta protesta, que incluye a la Comunidad Palestina en Catalunya, la Red Solidaria contra la Ocupación de Palestina y la plataforma 'Basta Complicidad con Israel', demandan un cese inmediato de la venta de armas a Israel y que se le exijan responsabilidades por sus 'crímenes contra la humanidad'. Esto resuena en el llamado global por la justicia y la paz en Oriente Medio.

La respuesta de la Generalitat fue también un punto focal de la protesta, con los manifestantes exigiendo que cesen las colaboraciones en el comercio de armamento con Israel. 'Es tiempo de que los líderes se pongan del lado de la justicia y no de la complicidad', afirmaron varios oradores.

La manifestación contó con la presencia de figuras destacadas, como el eurodiputado de Comuns-Sumar, Jaume Asens, y la diputada de la CUP en el Parlament, Laure Vega. Además, se unió a la marcha el histórico líder de ERC, David Minoves, presidente del Centro Internacional Escarré por las Minorías Étnicas y Nacionales (CIEMEN).

Entre los participantes también se encontraban los secretarios generales de los sindicatos UGT y CCOO, Camil Ros y Javier Pacecho, así como el exfiscal Anticorrupción Carlos Jiménez Villarejo, y representantes de las comunidades libanesa y palestina en Barcelona. Este acto no solo fue una llamada a la acción, sino un recordatorio de que la lucha por los derechos humanos y la justicia en Palestina sigue viva, atrayendo cada vez más apoyo en diversas partes del mundo.