María Corina Machado, la líder opositora venezolana, ha declarado que se encuentra en un "lugar seguro" después de haber sido detenida brevemente por las fuerzas de seguridad del régimen de Nicolás Maduro durante una protesta en Caracas. En este inquietante episodio, un ciudadano resultó herido de bala, lo que ha intensificado aún más el clima de tensión en el país.

Tras el incidente, el gobierno de Ecuador condenó la "detención" de Machado, señalando que esto es un claro ejemplo de la violación de los derechos humanos en Venezuela. El canciller ecuatoriano emitió un comunicado denunciando el abuso de poder y prometiendo seguir apoyando a la oposición venezolana.

El presidente chileno Gabriel Boric también se pronunció al respecto, instando a que se tomen medidas internacionales para restaurar la democracia en Venezuela. Asimismo, el expresidente colombiano Juan Manuel Santos demandó la liberación inmediata de Machado, mientras que el exmandatario Iván Duque calificó su detención como una demostración de la cobardía del régimen.

La Plataforma Unitaria Democrática (PUD), a la que pertenece Machado, pidió la liberación de un miembro de su equipo de prensa, quien fue detenido al finalizar una de las manifestaciones. La organización no gubernamental Foro Penal informó que al menos 16 personas fueron detenidas en diferentes estados del país durante estas protestas antichavistas.

Mientras tanto, manifestantes en diferentes ciudades, incluyendo Buenos Aires, han expresado su apoyo a Machado y a Edmundo González Urrutia, otro líder opositor. Las protestas continúan creciendo en números, llevando un mensaje claro: los venezolanos no temen reclamar sus derechos y buscan un cambio democrático. Hasta el momento, la comunidad internacional sigue observando de cerca los desarrollos en Venezuela, haciendo eco de la necesidad de un cambio urgente en la situación política del país.