Este pasado sábado 28 de septiembre, la ciudad de Jerez de la Frontera fue el escenario de una celebración nupcial que no solo unió a Ana Cristina Portillo y Santiago Camacho, sino que también brindó un desfile de moda entre los asistentes. Tras siete años de noviazgo, la feliz pareja decidió sellar su amor en el mismo lugar donde se conocieron durante la famosa feria de la ciudad.

La novia, hija de la conocida empresaria Sandra Domecq, deslumbró al llegar al altar del brazo de su padre, el afamado fotógrafo gaditano Fernando Portillo. Su increíble vestido fue diseñado por Jorge Acuña, un talentoso creador gallego que capturó la esencia de lo que Ana Cristina soñaba para su día especial.

Uno de los momentos más esperados fue la aparición de las hermanas de la novia: Eugenia, Claudia y Alejandra Osborne, quienes no decepcionaron con sus vestidos espectaculares, diseñados nada menos que por la propia novia. Cada hermana eligió su diseño personal, hecho a medida con las exclusivas telas de la firma de Ana Cristina.

Eugenia Osborne, conocida por su influencia en las redes sociales, optó por un vestido floral en tonos verdes y malvas, que resaltaba su figura con un escote asimétrico y una falda midi que fluía con gracia. Complementó su atuendo con unos elegantes 'stilettos' de ante y una impresionante pamela de la marca 'Mimoki'.

Alejandra Osborne brilló con un vibrante vestido amarillo adornado con un delicado estampado vegetal. Este diseño contaba con una falda larga y recta, así como un atrevido detalle 'cut out' y unas coquetas mangas de murciélago. Su cabello recogido en un imponente moño dejaba lucir unos grandes pendientes dorados a juego con sus sandalias de tacón, creando un look de ensueño.

Finalmente, Claudia Osborne optó por un vestido que se ajustaba perfectamente a su silueta. Con manga larga y cuello redondo, su diseño en tonos azulados y amarillos incluía una audaz abertura en la espalda. También decidió recoger su cabello, lo que permitió que los detalles de su atuendo fueran realmente los protagonistas. Como toque final, eligió unos tacones joya que complementaban su hermoso vestido.

Las tres hermanas Osborne se robaron todas las miradas mientras ayudaban a Ana Cristina a subir las escaleras de la iglesia, sosteniendo con cariño la cola de su impresionante vestido de novia. El evento no solo fue una celebración del amor, sino también una auténtica pasarela de estilo, que dejó huella entre los asistentes.