Los equipos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y los zapadores del Ejercito Español, junto con bomberos de diversas localidades del país, continúan en la ardua tarea de búsqueda de posibles víctimas en el aparcamiento del Centro Comercial Bonaire, ubicado en Aldaia, Valencia. Ayer, por primera vez, se logró acceder al nivel subterráneo del parking, encontrando alrededor de medio centenar de coches, pero afortunadamente, ningún cadáver hasta el momento.

Según fuentes del operativo, la mayor parte del agua que inundó el aparcamiento ha sido evacuada, aunque aún queda barro y una gran cantidad de objetos que deben ser retirados, lo que mantiene activo el rastreo. Este lunes, los equipos de rescate, equipados con mascarillas por la acumulación de monóxido de carbono de las bombas de gasolina, han encontrado todo tipo de pertenencias arrastradas por la crecida.

La tormenta que barrió la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre dejó el parking completamente inundado, que cuenta con dos accesos peatonales y cinco rampas para vehículos. En total, el Centro Comercial Bonaire, uno de los más grandes de España, dispone de 1.800 plazas en 60,000 metros cuadrados.

Afortunadamente, la dirección del centro comercial confirmó que ninguno de sus empleados quedó atrapado por la inundación. Vendedores de la zona informaron que durante el temporal no había una gran afluencia de clientes, ya que estaba en vigor un aviso de nivel rojo por fuertes lluvias.

El protocolo de seguridad del centro incluye la prevención de acceso al párking subterráneo en situaciones de emergencia, medidas que se pusieron en marcha aquella tarde. Hasta ahora, según la Guardia Civil, no se han encontrado cadáveres tras las primeras inspecciones en las instalaciones.

Un equipo de forenses, procedentes de distintas partes de España, estaba listo para recibir eventuales víctimas; sin embargo, la primera jornada de búsqueda haya concluido sin hallazgos. Informes preliminares indicaron que aún queda un metro y medio de agua por achicar de los cuatro que inundaron completamente el subterráneo, lo que permitió la entrada de buzos, kayaks y drones de la UME para llevar a cabo labores de reconocimiento.

Los responsables del operativo han afirmado que los resultados de la búsqueda no se darán a conocer hasta finalizar todas las tareas de rescate. Por otro lado, la atención se centra también en el párking del centro comercial MN4 en Alfafar, donde los bomberos están preparados para entrar con lanchas, tras haber reducido considerablemente el nivel de agua.

No obstante, un fallo técnico en la bomba de agua de la UME ha ralentizado las operaciones. Hasta ahora, en los primeros coches revisados no se han encontrado víctimas, lo cual es un rayo de esperanza en medio de esta tragedia.