Los discursos de Año Nuevo de los presidentes autonómicos resaltan las dos caras del PP en su oposición a Sánchez
2025-01-01
Autor: Lucia
Alberto Núñez Feijóo ha comenzado este 2025 de manera diferente respecto al inicio de 2024. En el primer día del año pasado, el Partido Popular (PP) distribuyó un video con el mensaje de Año Nuevo liderado por el propio Feijóo. Sin embargo, este 1 de enero, el PP se ha limitado a compartir un mensaje escrito del líder de la oposición, acompañado de un video que resume los momentos más destacados del último año político, según el criterio del partido.
Feijóo expresó que "este 2025 asumimos con ambición la responsabilidad de ofrecer una alternativa que devuelva la prosperidad a los españoles, la dignidad a la nación y el valor del servicio a la política", reafirmando su mensaje del año anterior. Además, dejó entrever la posibilidad de convocar elecciones generales o en algunas comunidades autónomas en los próximos meses. "2025 será un año muy intenso para nosotros. No me digáis que no os lo estoy avisando", antepuso Feijóo en una reunión del Comité Ejecutivo Nacional de su partido el 16 de diciembre.
Sin un video propio, el líder del PP centró la atención en los discursos de Año Nuevo de los presidentes autonómicos de su partido, 11 de ellos gobernados por el PP. Desde septiembre, estos presidentes han mantenido encuentros cara a cara con Pedro Sánchez, con la excepción de Isabel Díaz Ayuso, presidenta de Madrid, quien se negó a participar. Aunque se saludaron durante la Conferencia de Presidentes en diciembre, el encuentro terminó sin acuerdos significativos, dejando entrever una cierta tensión entre Sánchez y los líderes autonómicos del PP.
Los discursos de Año Nuevo de los presidentes del PP han puesto de manifiesto las diferencias al interior del partido. Díaz Ayuso continuó su lucha en contra de Sánchez, aunque sin mencionarlo directamente. En su mensaje grabado desde el hospital enfermera Isabel Zendal, hizo hincapié en su resistencia ante la "indignidad" y el "abuso". Este hospital se convirtió en el núcleo de su estrategia durante la pandemia, pero su futuro es incierto debido a la falta de ingresos suficientes a pesar de haber costado más de 150 millones de euros.
Dijo Ayuso: "Ser la capital de España es una enorme responsabilidad y un activo para todos los españoles. Privar a cada ciudadano de algo que ha costado siglos sería un suicidio político". Estos comentarios reflejan su oposición a las decisiones del gobierno central, especialmente en lo que respecta al desplazamiento de sedes de organismos estatales fuera de Madrid.
A unos 700 kilómetros del Zendal, el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, eligió el Puerto de Algeciras para brindar sus felicitaciones por el nuevo año. En su discurso, Moreno celebró el crecimiento de la economía andaluza y reafirmó su apoyo al Gobierno de España en relación a Gibraltar. Además, se mostró a favor de hacer de la política un servicio público noble, distanciándose del enfoque combativo de Ayuso.
Las palabras de Moreno no solo le alejan de Ayuso, sino también del liderazgo nacional del PP. Al abordar el tema de la migración, pidió que no se "mirara para otro lado" frente al "drama" de la inmigración, un tema significativamente espinoso en este periodo. En un momento de creciente tensión entre PSOE y PP debido a las crisis de migración, estas declaraciones de Moreno fueron un llamado a la colaboración en vez del enfrentamiento.
El presidente de la Comunitat Valenciana, Carlos Mazón, abordó el impacto de la reciente DANA, que afectó gravemente a su comunidad. Afirmó que "no podemos permitirnos el lujo de la división" en un momento que necesita unidad para reconstruir. Sin embargo, demandó al Gobierno central "ayudas directas y efectivas" para afrontar los desafíos económicos recientes.
A la vez, Mazón y otros barones del PP insistieron en la necesidad de reformar el sistema de financiación autonómico, que tiene más de una década de antigüedad, considerándolo injusto. A pesar de las diferencias en las posiciones regionales, una cosa queda clara: el PP está enfrentando un año lleno de desafíos tanto internos como externos.
El presidente de Aragón, Jorge Azcón, afirmó que las perspectivas de desarrollo en su comunidad requieren una participación adecuada del Gobierno de España. Aunque su discurso fue menos agresivo que el de Ayuso, también lanzó dardos sutiles al Ejecutivo. Por otro lado, en la Región de Murcia, Fernando López Miras citó la necesidad de un diálogo constructivo entre los distintos grupos ideológicos, subrayando la importancia de priorizar el bienestar público.
En resumen, las distintas posturas de los presidentes del PP muestran las divisiones internas en el partido, que se verán desafiadas en los próximos meses. La relación con Vox y la capacidad de cohesión del partido serán elementos clave para la estabilidad política en las diversas comunidades autónomas del PP.