
¡Los Cuatro Astronautas Que Cambiarán Nuestra Mirada a la Luna Están Listos Para Volar!
2025-08-30
Autor: Marta
Después de un largo retraso, la nave Orion de la NASA está casi lista para la primera misión tripulada a la órbita lunar en más de 50 años. Los astronautas estadounidenses Reid Wiseman, Victor Glover, Christina Koch y el canadiense Jeremy Hansen han sido seleccionados para vivir una experiencia sin precedentes en la Luna. Sin embargo, la incertidumbre persiste: aún no tienen una fecha definitiva para su vuelo.
El Audaz Plan de Artemis II
La misión Artemis II representa un hito similar al de Apollo 8, marcando el inicio de una nueva era de exploración lunar. A diferencia de su predecesora, Artemis II será un sobrevuelo de la Luna con el objetivo de probar la seguridad de la nave Orion y su cohete, el Space Launch System (SLS), para transportar astronautas a los confines del espacio.
El plan de vuelo, que tendrá una duración de aproximadamente 10 días, comienza con un despegue desde Florida y contempla dos órbitas alrededor de la Tierra. Durante la primera, que durará sólo 90 minutos, y la segunda, de casi 24 horas, los astronautas alcanzarán una altitud impresionante de más de 74,000 km. Este paso es crucial para verificar los sistemas de soporte vital antes de dirigirse hacia la Luna.
Con los sistemas verificados, el módulo de servicio de la Orion, un aporte de la Agencia Espacial Europea, activará su motor para una inyección translunar que llevará a la tripulación hacia la Luna en tan solo cuatro días.
Una Mirada Única a la Cara Oculta de la Luna
Durante su travesía, los cuatro astronautas sobrevolarán a unos 7,400 km de la cara oculta de la Luna, viajando más lejos de la Tierra que cualquier humano antes. Desde esa impresionante perspectiva, podrán observar la Luna en todo su esplendor y ver nuestro planeta como una pequeña canica azul a casi 400,000 km de distancia.
Gracias a una trayectoria de 'retorno libre', las fuerzas gravitatorias de la Tierra y la Luna guiarán a la nave de regreso sin necesidad de incurrir en grandes encendidos de motor, culminando el viaje con un amerizaje controlado en el océano Pacífico.
La Espera y los Desafíos de Artemis II
Seleccionados en abril de 2023, los astronautas pertenecen a la NASA y la Agencia Espacial Canadiense; un equipo diverso que incluye a la especialista Christina Koch, conocida por su récord de vuelo espacial más largo. Originalmente, Artemis II se programó para finales de 2024, pero ahora se espera su lanzamiento no antes de abril de 2026 debido a retrasos que han puesto el foco en el escudo térmico de la nave.
Investigaciones recientes mostraron que el escudo había sufrido daños significativos durante su primer viaje. Esto se debió a que los gases generados no escaparon correctamente durante la reentrada, acumulando presión que causó la pérdida de material.
Preparativos Intensos para la Misión
Mientras tanto, los astronautas no han estado inactivos. Han participado en intensos ensayos, ensayando simulaciones en su cápsula Orion, totalmente cargada y conectada a los sistemas vitales. En agosto, trabajaron en la instalación de un sistema de aborto de lanzamiento para asegurar la seguridad de la tripulación.
Además, la NASA ha realizado simulacros de rescate en la costa de Florida para garantizar que saben cómo responder a cualquier emergencia durante la misión.
Una Misión con Fines Científicos
Aunque Artemis II es fundamentalmente técnica, su valor científico es incalculable. Los astronautas recibirán formación geológica intensiva para aprovechar al máximo su sobrevuelo, pudiendo ser los primeros en ver ciertas regiones de la cara oculta de la Luna. Además, tendrán la importante tarea de documentar cráteres de impacto y flujos de lava antiguos, contribuyendo a la planificación de la futura misión de alunizaje Artemis III.
La exploración lunar nunca ha sido tan crucial, y mientras el tiempo avanza, los ojos del mundo están puestos en estos valientes astronautas que están a las puertas de lo desconocido. Si todo sale bien, Artemis II no solo será una hoja de ruta para futuros vuelos, sino también un pasaporte para descubrir los secretos que la Luna ha guardado durante milenios.