¡Las Casas Reales europeas se visten de gala y la Navidad nunca estuvo tan cargada de emociones!
2024-12-25
Autor: Lucia
Las festividades navideñas se han apoderado de las Casas Reales de Europa, donde cada familia real celebra a su manera, destacando la unión, la tradición y, en algunos casos, la controversia.
En España, la cena de Nochebuena se convierte en el evento más significativo. La reina Letizia organiza una velada íntima en la que su madre, Paloma Rocasolano, y su pareja, Markus Tokuaboh, se unen a la familia real. Antes de la cena, visitan a Doña Sofía, quien celebra rodeada de su hermana, Irene de Grecia. El menú de la noche incluye delicados platos como pavo relleno de verduras, angulas y un helado de café, demostrando así el gusto gourmet de la familia.
Mientras tanto, en Reino Unido, el Rey Carlos III está listo para recibir a más de 46 invitados en Sandringham, creando una atmósfera de alegría y celebración. Sin embargo, la ausencia de los Sussex, que prefieren permanecer en su lujosa vida californiana, deja un aire de especulación sobre las tensiones familiares. La tradición británica incluye cantar villancicos y disfrutar de un almuerzo con pavo asado, todas actividades que buscan reforzar la unión familiar en estos tiempos de celebración.
Por su parte, la Casa Real sueca enfrenta un año complicado debido a una crisis financiera que ha obligado a los Reyes, Carlos XVI y Silvia, a adoptar una Navidad más austera. A pesar de las dificultades, la familia se reúne en su palacio con celebraciones sencillas, pero llenas de significado, como la llegada de Papá Noel que entusiasma a los más pequeños.
En Noruega, los Reyes Sonia y Harald V se enfrentan a una Navidad llena de sombras. La ausencia de Marius, hijo de la Princesa Mette-Marit, y las acusaciones que rodean a Durek Verret, marido de la princesa Marta Luisa, han marcado un celebrado ambiente. Aun así, la tradición de cantar villancicos y compartir una cena familiar se mantiene, ofreciendo un atisbo de esperanza en medio de la adversidad.
Finalmente, en Mónaco, la celebración comenzó el 2 de diciembre con el encendido del alumbrado navideño por el Príncipe Alberto II, quien comparte la alegría de la temporada con su esposa Charlene y sus hijos, Jacques y Gabriella. Las festividades en el Palacio Grimaldi se caracterizan por su intimidad y discreción, pero siempre con un toque de esplendor.
La Navidad en Europa, por tanto, se presenta llena de contrastes, entre celebraciones fastuosas y momentos de reflexión en medio de retos personales y familiares. ¿Qué sorpresas más deparará esta temporada para las Casas Reales? ¡Los ojos del mundo están puestos en estas familias que a menudo viven bajo el escrutinio público!