El caso de Joan Laporta

El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, se presentó ante el juez en Barcelona el lunes, rechazando cualquier implicación en una supuesta estafa de 4,7 millones de euros relacionada con la empresa CSSB Limited, ubicada en Hong Kong. Durante su declaración, Laporta apuntó a Joan Oliver, el exgestor de la compañía y director general del club durante su primer mandato, como el verdadero responsable, argumentando que su inclusión en la querella se debe a su fama pública y no a su actuación dentro de la empresa.

Contexto de la controversia

La controversia se centra en una inversión de 2,4 millones de euros realizada por una familia que ganó la Lotería Primitiva en 2014. La familia creía que la presencia de Laporta en las promociones de CSSB certificaría la solidez de su inversión, pero se sintieron engañados al no obtener los beneficios prometidos. Laporta explicó que era administrador solidario de Core Store, la empresa dueña del 57% de CSSB, y se desvinculó de las decisiones relacionadas con la gestión diaria de la empresa.

Involucramiento y gestión

La sociedad CSSB también estuvo involucrada con el club Reus Deportivo y tenía planes de invertir en un equipo de fútbol chino de segunda división, aunque ese proyecto no llegó a concretarse. Laporta describió la situación como un proyecto fallido y recalcó que la culpa recaía sobre Oliver, quien manejaba ambas entidades. "Si el negocio ha salido mal, la responsabilidad la tienen sus gestores", dijo Laporta, según fuentes judiciales.

Declaraciones finales y reacciones

Al finalizar su declaración, el presidente del Barça evitó hacer comentarios sobre el caso, pero no perdió la oportunidad de comentar sobre un penalti no concedido a su jugador Koundé en un reciente partido contra el Getafe, calificándolo de "vergonzoso". También insistió en su desconocimiento sobre la conexión entre Core Store y CSSB, a pesar de haber trabajado en la primera hasta 2019.

Reacción de la parte demandante

Joan Comas, el abogado de la familia demandante, solicitó la práctica de nuevas pruebas para aclarar la situación: "Todo lo que nos dicen que no saben o no recuerdan lo hemos pedido a través de bancos, ya que una comisión rogatoria a China es imposible", afirmó. Por otro lado, Jordi Pujante, el representante legal de Laporta, recordó que la querella había sido archivada anteriormente, pero la Audiencia de Barcelona obligó al juez a reabrir el caso para investigar más.

Otros implicados en el caso

Además de Laporta, otros dos individuos, un concesionario de automóviles y su pareja, exagente de Bankinter, también han sido interrogados por el mismo delito. Ambos admitieron haber aconsejado a la familia invertir en CSSB, atraídos por las atractivas rentabilidades y la supuesta seguridad que daba el respaldo de "personas populares".

Conclusión y futuro del caso

La controversia sigue en desarrollo, y el caso promete más revelaciones a medida que avancen las investigaciones. ¿Logrará Laporta desvincularse por completo de esta situación, o enfrentará más complicaciones en el futuro?