Amalia de Holanda: La Sorpresa de la Asamblea General

Este año, la Reina Máxima de Holanda llegó a la Asamblea General de Naciones Unidas acompañada por su hija, la Princesa Amalia. Este viaje a Estados Unidos es más que un simple compromiso; es una lección de vida y liderazgo para Amalia, quien por primera vez desempeña un papel especial al lado de su madre, supervisando su labor en la ONU.

La Princesa en Formación

Aún sin un rol definido dentro de la Familia Real, Amalia de Holanda está comprometida con sus estudios en Derecho en la Universidad de Ámsterdam y participando en un riguroso programa del Defensity College. Aquí, combina formación militar básica con estudios superiores en defensa, preparándose para un futuro como jefa de Estado. Su carga académica es intensa, pero la Casa Real asegura que 'si sus estudios lo permiten', participará en actos reales que la acerquen a su destino.

Una Semana Intensa en la Capital Americana

La Reina Máxima ha comenzado su agenda en Washington D.C. como asesora especial del Secretario General de la ONU. Se reunirá con líderes del Banco Interamericano de Desarrollo y representantes del G20, todos comprometidos con el desarrollo y la lucha contra la pobreza. Amalia la acompañará, aprendiendo de su madre y el impacto que puede tener su posición.

Expectativas para la Asamblea General

El martes, ambas asistirán a la inauguración de la Asamblea, donde la Reina tendrá una serie de reuniones bilaterales. Al día siguiente, Máxima copresentará una mesa redonda y el jueves presentará su primer informe como Asesora General. Será un evento histórico, marcando los inicios de Amalia en el ámbito real.

Recuerdos en la Gran Manzana

Tras la asamblea, no se descarta que madre e hija exploren Nueva York, una ciudad con un significado especial para la Reina. Fue aquí donde Máxima vivió entre 1996 y 2000, trabajando en finanzas y enamorándose de su futuro esposo, Guillermo. Este viaje no solo es un deber, sino también un regreso a sus raíces.