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La cuenta regresiva de Santi Aldama: ¿Se abrirán nuevas oportunidades?

2024-10-06

Autor: José

Santi Aldama ha dejado una huella impresionante en sus últimos partidos oficiales, aún frescos en la memoria de los fanáticos, justo antes de la tan esperada temporada 2024-25, su cuarto año con los Memphis Grizzlies. A sus 23 años, este talentoso ala-pívot canario culminó su paso por los Juegos Olímpicos de París con un promedio de más de 17 puntos y 9 rebotes, además de destacar con un notable 45% en triples. Esto demuestra su enorme potencial ofensivo, un siete pies (2,13 m) con habilidades para el tiro, movimientos excelsos cerca del aro y una gran visión de juego. Sin duda, está destinado a ser uno de los grandes referentes de la Selección Española en el baloncesto FIBA en el futuro.

Aunque su aparición en la selección nacional ha sido reciente, Aldama no es un desconocido. En 2019, fue nombrado MVP del Europeo Sub-18 en Grecia, ganando el oro. Posteriormente, en su búsqueda por alcanzar la NBA, eligió una universidad menos convencional, Loyola-Maryland, lo que le allanó el camino hacia el draft de 2021, donde fue seleccionado como el último pick de la primera ronda (30). Esta decisión ha demostrado ser un movimiento estratégico inteligente, pues le ha permitido desarrollarse como jugador.

En sus tres temporadas con los Grizzlies, Aldama ha evolucionado de ser un proyecto a convertirse en un jugador clave en la rotación. La pasada temporada, su equipo se enfrentó a muchas lesiones, pero él se mantuvo constante, jugando al menos 60 partidos. En un año de reestructuración tras dos temporadas consecutivas de éxito, Aldama se ha convertido en un pilar sobre el cual los Grizzlies pueden construir un nuevo futuro.

Los números de Aldama el año pasado fueron sólidos: un promedio de 10,7 puntos, 5,8 rebotes y 2,3 asistencias, con un 35% en triples. Aunque sigue siendo cuestionable si mantendrá un puesto fijo como titular esta temporada, su versatilidad para jugar en varias posiciones entre el tres y el cinco lo convierte en una pieza valiosa para cualquier plantilla.

Este verano, Aldama se encuentra en un punto crítico de su carrera. Fue elegido en la primera ronda, lo que le asegura un contrato de 10,2 millones de dólares por cuatro años, pero también le da la opción de utilizar su rendimiento para negociar una extensión. Con otros jugadores de su generación firmando extensiones lucrativas, como Cade Cunningham y Scottie Barnes, Aldama podría aspirar a una extensión que podría llegar a 50 millones por cuatro años, aumentando su salario base considerablemente.

A medida que se acerca el comienzo de la temporada, el tiempo corre. La fecha clave es el 25 de octubre, justo antes del inicio de la temporada. Si no se llega a un acuerdo antes de esa fecha, Aldama tendrá que esperar hasta el final de la temporada para poder renegociar. Si se convierte en agente libre restringido, los Grizzlies tendrán la oportunidad de igualar cualquier oferta que reciba de otros equipos.

Sin embargo, en el último mes ha habido pocas noticias sobre las negociaciones entre Aldama y los Grizzlies, lo que ha incrementado la presión. Algunos analistas sugieren que podría ser un objetivo de traspaso, especialmente si no se renueva su contrato. Esto podría atraer a equipos que buscan talentos jóvenes y prometedores.

La situación financiera de los Grizzlies también influye. Con mucho dinero invertido en jugadores clave como Ja Morant y Jaren Jackson Jr., la franquicia debe evaluar el impacto del nuevo contrato de Aldama en su futuro. En las próximas semanas, se revelará cómo se desenvuelve esta situación. Si Aldama no firma la extensión, podría ser un gran movimiento para varias franquicias en busca de revitalizar sus plantillas. Mientras tanto, Aldama deberá centrarse en su juego y demostrar que merece un contrato que refleje su verdadero valor, y todo apuntará a que su futuro en la NBA es brillante.