La nueva comedia romántica de Netflix, titulada 'Nadie quiere esto', ha capturado la atención de la generación millennial, apelando a la nostalgia a través de su impresionante elenco. En el centro de esta producción se encuentran Adam Brody, reconocido por su emblemático papel de Seth Cohen en 'The OC', y Kristen Bell, quien se ganó los corazones de muchos como Veronica Mars. Este regreso a la pantalla ha sido recibido con entusiasmo, ya que ambos actores son íconos de una era dorada de la televisión.

El argumento se centra en Noah, un rabino progresista interpretado por Brody, quien atraviesa un difícil proceso de separación de su prometida. Noah es un personaje con el que muchos pueden identificarse: reflexivo, divertido y lleno de contradicciones. Su mundo se descompone cuando conoce a Joanne, una mujer que desafía todas las expectativas de su familia y su congregación. Joanne es audaz, culta y un poco irreverente; conduce un podcast que analiza las relaciones y el sexo, lo que provoca la desaprobación de su entorno.

La trama se desarrolla en un entorno de constantes choques culturales y expectativas sociales. La primera reunión de Noah y Joanne tiene lugar en una fiesta, donde la atracción es instantánea, aunque también están rodeados de amigos que advierten sobre las complicaciones de un posible romance. A medida que profundizan en su conexión, la serie explora la complejidad de sus vidas: Noah enfrenta sus responsabilidades religiosas y familiares, mientras que Joanne lucha contra los prejuicios de su círculo social.

La creadora Erin Foster, que también tiene algo de historia detrás de las cámaras (hija del famoso productor David Foster), hace un trabajo admirable al introducir a los personajes de una manera que se siente familiar. La serie no se detiene en introducciones largas; en cambio, se sumerge rápidamente en las dinámicas de sus vidas y relaciones, lo que la hace entretenida y ligera.

La química entre Brody y Bell es palpable y contribuye significativamente al atractivo de la serie. A pesar de que la escritura podría desarrollarse más en algunos aspectos, el carisma de ambos actores y su habilidad para conectar emocionalmente con la audiencia hacen que sigamos interesados. Entre humor y momentos de vulnerabilidad, los diálogos revelan mucho sobre sus personalidades, ofreciendo interrupciones refrescantes y elocuentes.

Sin embargo, la trama aún guarda incógnitas que podrían explorarse más a fondo, como la relación de Noah con su identidad judía y cómo afectará su futuro amoroso. La serie combina temas modernos, desde las expectativas románticas hasta la lucha interna por balancear las creencias personales y las carreras profesionales, atrayendo a los espectadores con un enfoque fresco.

'Nadie quiere esto' no solo es un deleite para los aficionados a las comedias románticas; también toca temas de relevancia social y personal. Con episodios que rondan los 25 minutos, la serie invita a los espectadores a reflexionar sobre las relaciones en la era moderna, todo mientras se disfrutan de referencias nostálgicas que traerán una sonrisa a cada rostro. ¡No te la pierdas! La química y el drama son irresistibles.