
¡La Clave de la Salud! Cómo la Actividad Física Personalizada Puede Salvarte
2025-09-09
Autor: Marta
La Revolución de la Actividad Física Individualizada
En un contundente anuncio desde Madrid, el catedrático de Fisiología del Ejercicio, Alejandro Lucía, ha revelado que prescribir actividad física adaptada a cada persona no solo puede mejorar la salud, sino también prevenir una serie de enfermedades devastadoras.
Informe Innovador sobre Medicina del Futuro
Lucía, coordinador del impactante 'Informe Anticipando: Actividad Física de Precisión en la Medicina del Futuro', destaca que este enfoque innovador podría ser el complemento ideal a tratamientos farmacológicos y quirúrgicos. La Fundación Instituto Roche respalda estos esfuerzos mediante la exploración del potencial transformador de la actividad física.
Impacto en la Salud Pública
Incorporar la actividad física personalizada en estrategias de salud pública podría no solo mejorar la salud individual, sino también beneficiar a la población en su conjunto, aumentando la sostenibilidad y eficiencia del sistema de salud y reduciendo costos.
Prevención de Enfermedades Críticas
Lucía también ha resaltado los impresionantes beneficios de la actividad física en la prevención de enfermedades cardiovasculares, metabólicas, neurológicas y ciertos tipos de cáncer. ¡Los números hablan por sí mismos!
El Ejercicio y los Pacientes Oncológicos
Para los pacientes con cáncer, la actividad física se ha consolidado como un pilar en su tratamiento integral, desde antes hasta después de la terapia. Inversamente, se ha demostrado que el ejercicio puede reducir el riesgo de desarrollar cáncer de mama, colon y otros en un 20%.
Ciencia que Respalda la Prevención
Estudios recientes han revelado que la actividad física no solo reduce la inflamación crónica relacionada con el cáncer, sino que también fortalece el sistema inmunológico, mejorando así el proceso de recuperación y disminuyendo el riesgo de recurrencias.
Beneficios Cardiovasculares Innegables
Lucía subraya que el ejercicio regular puede reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares hasta en un 50%. En casos de infartos, el riesgo se puede disminuir entre un 26 y un 38%. Las cifras son un llamado urgente a la acción.
Impacto en Enfermedades Neurodegenerativas
La actividad física también es vital para combatir enfermedades neurodegenerativas. Practicar ejercicio al menos dos veces por semana puede disminuir el riesgo de deterioro cognitivo y demencia entre un 33 y un 38%. En el caso del Parkinson, se habla de una reducción de hasta el 34%.
Un Llamado a la Acción
Aunque los beneficios son claros, Lucía enfatiza la necesidad de mayor apoyo institucional, investigación continua y formación de profesionales para asegurar que la actividad física de precisión se convierta en una herramienta estándar de prevención y tratamiento.