Después de la controversia que rodeó a Magnus Carlsen por jugar con tejanos, todos los ojos estaban puestos en el Mundial Relámpago de Ajedrez que se lleva a cabo en la icónica ciudad de Nueva York. Carlsen ha demostrado que a pesar de las críticas, su talento sigue brillando, incluso firmando un contrato con G-STAR para ser el rostro de su línea de ropa vaquera. Sin embargo, su camino hasta los cuartos de final no fue fácil. Este torneo tiene un ritmo vertiginoso, permitiendo a los jugadores realizar hasta dos movimientos por segundo, lo que añade una dosis extra de presión y emoción a cada partida.

El torneo se está llevando a cabo en el impresionante edificio Cipriani, situado cerca de la bolsa de Nueva York, un lugar donde el silencio y la tensión son palpables. A pesar de contar con 300 competidores y numerosos espectadores que han desembolsado entre 65 y 220 dólares para estar cerca de los mejores jugadores del mundo, la atmósfera es casi funeraria. La adrenalina entre los jugadores es palpable, y el tiempo se convierte en su mayor enemigo, llevándolos a apretar los relojes con fuerza a medida que los segundos se desvanecen.

En la tercera ronda, Carlsen se encontró en una situación inesperada contra el neerlandés Benjamin Bok. A pesar de establecer rápidamente una posición ventajosa en el tablero, su falta de concentración y un momento de confianza excesiva le llevaron a cometer un error que Bok capitalizó para forzar un empate. A pesar de este traspié, Carlsen se adelantó para ofrecer la mano a su rival, demostrando su deportividad e incluso recibiendo elogios de nada menos que el pentacampeón del mundo, Viswanathan Anand.

Pero el camino de Carlsen estuvo lleno de altibajos. Tras ganar a Mamediárov de Azerbaiyán y Aronián de Armenia, el jugador noruego se vio obligado a luchar con fuerza en la penúltima ronda para asegurar su lugar en cuartos de final contra el también estadounidense Sevián. La tensión del momento fue abrumadora, pero la suerte sonrió a Carlsen, permitiéndole avanzar al último enfrentamiento del torneo.

Y así, el destino ha decidido que en la ronda de cuartos de final, Carlsen se enfrente al controversial Hans Niemann, un rival al que en 2022 acusó de hacer trampas, lo que terminó en un acuerdo extrajudicial costoso para el campeón noruego. Las expectativas están altas, y el público ardiente está ansioso por ver cómo se desarrolla este electrizante duelo histórico en el ajedrez. Los emparejamientos restantes incluyen a Niepómniashi contra Murzin, Duda enfrentándose a Caruana, y Firouzja encontrándose con So.

Respecto a los jugadores españoles, sus resultados también han llamado la atención: Alan Pichot finalizó en la posición 59, José Carlos Ibarra en el puesto 105, y David Antón en el 123. En el torneo femenino, Marta García se posicionó en el 37, mientras que Sara Khadem terminó en el 44. ¡La emoción del ajedrez está en su punto más alto y las sorpresas podrían estar a la vuelta de la esquina!