La reciente caída del Euríbor, impulsada por las últimas disminuciones de tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE), está trayendo un gran alivio económico a aquellas familias que adquirieron sus viviendas a través de hipotecas variables. Para los propietarios que tengan su revisión hipotecaria en octubre de 2023, cuando el Euríbor ha cerrado en un promedio del 2,69%, se espera un descenso significativo en su cuota mensual, que oscilará entre 120 y 240 euros al mes, lo cual se traduce en un ahorro anual de entre 1.440 y 2.880 euros.

Es notable recordar que el Euríbor dejó atrás los índices negativos en abril de 2022, comenzando una escalada que alcanzó un máximo del 4,16% en octubre de 2022. Sin embargo, desde entonces ha comenzado una bajada gradual, marcada por recortes sucesivos del BCE en junio, septiembre y octubre, donde la tasa de interés se redujo en 0,25% en cada ocasión. Esto ha llevado al Euríbor a su nivel más bajo en los últimos dos años, afectando positivamente las condiciones de las hipotecas a tipo variable.

Por ejemplo, un préstamo medio de 150.000 euros a 25 años con un diferencial del 1% verá su cuota mensual reducirse de aproximadamente 890 euros a 770 euros, lo que representa un ahorro de 120 euros al mes. En el caso de hipotecas mayores, como una de 200.000 euros, la cuota se disminuirá de 1.188 euros a 1.026 euros, ahorrando 162 euros mensuales. Sorprendentemente, los prestatarios con hipotecas de 300.000 euros experimentarán una disminución en sus pagos de 1.780 euros a 1.540 euros, lo que es una reducción de 240 euros mensuales.

Fortaleciendo esta tendencia, la Asociación de Usuarios Financieros (Asufin) ha indicado que los meses de octubre y noviembre serán los que ofrezcan las mayores reducciones, ya que el Euríbor se encontraba en el 4% durante esos meses el año pasado. Con un pronóstico de que el Euríbor seguirá bajando, se anticipan más alivios para los hogares en los próximos meses, especialmente si el BCE realiza más recortes de tipos.

Reactivación del mercado inmobiliario

La mejora en el Euríbor no solo beneficia a los hipotecados, sino que también parece estar reactivando el mercado de compraventa de viviendas. Tras un año de contención, comienzan a notarse cifras más positivas en la firma de hipotecas y en las transacciones inmobiliarias en general.

Por ejemplo, en Málaga, los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) indican que en los primeros ocho meses de 2023 se registraron 22.919 compraventas y 12.354 préstamos hipotecarios, mostrando una caída mínima del 5,1% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Esto es un signo de que el mercado está comenzando a recuperarse, después de periodos en los que las caídas eran del 10% al 20%.

Un dato interesante es que cerca del 46% de las compraventas se realizan sin recurrir a hipotecas, lo que demuestra un fortalecimiento del perfil de compradores con altos recursos económicos, muchos de ellos inversores extranjeros. Sin embargo, la mayoría de las transacciones (54%) aún se efectúan con financiamiento. A pesar de esto, el importe medio de las hipotecas parece continuar al alza, superando los niveles del boom inmobiliario de 2007.

Expectativas optimistas

Con esta tendencia de recuperación, portales inmobiliarios pronostican un aumento en las operaciones hipotecarias y un ciclo de bonanza en el mercado. Tanto Idealista como Fotocasa coinciden en que se abre una fase de dinamismo, donde la alta demanda y el alivio en los tipos de interés beneficiarán a los compradores.

En conclusión, si continúan estas tendencias, no solo los hipotecados verán aliviadas sus cuotas, sino que también se espera una revitalización del mercado inmobiliario en general. La combinación de un Euríbor en descenso, tasas de interés más competitivas y una demanda sólida sugiere un futuro prometedor para quienes buscan adquirir vivienda en España.