Años después de los horripilantes asesinatos de Eva María Aznárez y Mercedes Lázaro, las autoridades reabren el caso y llaman de nuevo al único testigo que pudo haber visto algo crucial: un vigilante de seguridad que se topó con el cadáver de Eva María justo en el momento en que todo ocurrió. El inspector de policía Marco Antonio Navarro ha sido el encargado de la investigación y detalla que están realizando un estudio fotográfico extremadamente preciso: "Lo que hacemos es recopilar imágenes de Malcolm de aquella época, con la misma edad que tenía entonces. Además, comparamos su fotos con varias de otras personas que tienen características similares en raza y complexión", explica Navarro.

Durante este proceso, el juez instructor Rafael Lasala reveló un momento impactante: "Cuando el vigilante vio la foto de Malcolm, dio un respingo. Dijo, 'es este', y señaló directamente a Malcolm". Esta identificación no solo complica la vida de Harvey, al ser señalado como el principal sospechoso en el asesinato de Eva María, sino que conecta su nombre trágicamente con el homicidio de Mercedes Lázaro, ocurrido 40 días antes, lo que aumenta la presión sobre el caso.

Malcolm, quien una vez fue respetado como sheriff, se ha convertido en el centro de una tormenta mediática. Días después de ser señalado, su vida dio un giro drástico. Recientes informes sugieren que ha abandonado España y se encuentra en paradero desconocido, lo que ha generado especulaciones sobre su estado mental y su posible intención de escapar de la justicia. Las autoridades ahora están utilizando tecnología de reconocimiento facial y análisis de datos para rastrear sus movimientos.

Mientras tanto, las familias de Eva María y Mercedes claman por justicia y se intensifican las manifestaciones en las redes sociales para presionar a la policía a resolver el caso. ¿Logrará la justicia alcanzar a Malcolm Harvey, el sheriff caído en desgracia, o seguirá burlándose de las autoridades? La búsqueda por la verdad apenas comienza.