Ciencia

¡Inundaciones devastadoras en Valencia! La DANA desata un océano de agua

2024-11-03

Autor: Lucia

La reciente inundación en Valencia ha resaltado uno de los mayores peligros naturales: la crecida de los ríos, que pone en grave riesgo a las comunidades cercanas. En el área metropolitana de Valencia, especialmente en la comarca de L'Horta Sud, residen aproximadamente 400.000 personas. Esta zona fue declarada como la ‘zona cero’ debido a los efectos devastadores de la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que ha azotado la región.

Victoria Rosselló, jefa de meteorología de À Punt, proporcionó detalles impactantes sobre la magnitud de la tragedia. En una reciente aparición en televisión pública, Rosselló afirmó que la rambla del Poyo, que atraviesa esta comarca, experimentó una subida de agua que alcanzó los 2.000 metros cúbicos por segundo, lo que equivale a cuatro veces el caudal del Ebro. Esta cantidad monstruosa se traduce en la impresionante cifra de dos millones de litros de agua por segundo.

Rosselló también expresó su preocupación sobre la gestión de los avisos meteorológicos por parte de la AEMET (Agencia Estatal de Meteorología), que ha sido objeto de controversia. A pesar de que la provincia de Valencia estuvo bajo aviso rojo durante la mañana del crítico 29 de octubre, la alerta no se dio a conocer a la población hasta las ocho de la tarde, momento en el que la rambla había alcanzado su punto máximo de inundación.

Los datos presentados por la experta son alarmantes: "Sabíamos que había caído 400 litros por metro cuadrado y que el agua iría a la rambla del Poyo. A las tres de la tarde ya habíamos advertido que no se podía salir de casa, pero la alarma general no se activó hasta más tarde, cuando la situación se volvió insostenible". Este tipo de información debería estar más disponible y accesible a la población, enfatizó.

La cuenca que comprende las ramblas Poyo, Pozalet y Saleta, con una extensión de unos 450 kilómetros cuadrados, presenta características morfológicas que la hacen vulnerable a estos fenómenos. Según un informe de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), la geografía de la región, con pendientes abruptas y precipitaciones intensas, genera caudales extremadamente altos al acercarse a zonas urbanas.

La situación actual pone de relieve la necesidad urgente de implementar políticas efectivas que prevengan inundaciones futuras. A pesar de que se han hecho esfuerzos de gestión desde los años 90, los informes muestran que la vulnerabilidad de varias poblaciones en la huerta valenciana persiste. Existe un riesgo constante de inundación que afecta a 11 municipios directamente y hasta 32 de forma indirecta.

A pesar de las obras de encauzamiento finalizadas en 2004, que buscaban mejorar el cauce del barranco de Poyo y aumentar su capacidad a 800 m³/s, los desafíos geográficos y meteorológicos siguen siendo un grave problema. La historia de estas inundaciones y la respuesta de las autoridades subrayan la urgencia de mejorar la infraestructura y los sistemas de alerta para proteger a la población.

La devastación emocional y material de estos eventos naturales es significativa, y las comunidades afectadas claman por respuestas y soluciones efectivas que eviten que esta tragedia se repita en el futuro. Con el cambio climático y sus efectos en el clima, la responsabilidad de actuar de manera proactiva es más crucial que nunca.