Un impactante caso ha conmocionado a Indonesia, donde un padre identificado como R. A. vendió a su bebé de 11 meses a través de Facebook por la escalofriante suma de 900 euros. Según informes del jefe de la policía local, Zain Dwi Nugroho, el padre confessó que había vendido a su hijo después de que alguien lo presionara para revelar su paradero.

La investigación policial llevó rápidamente a la localización del bebé en una casa alquilada en Tangerang, donde se encontraron a otros dos adultos que fueron arrestados por su supuesta implicación en una red de tráfico de personas. Este horroroso hecho ha desatado una ola de indignación tanto en la comunidad local como a nivel nacional.

Las autoridades informaron que R. A., al enterarse de que había personas interesadas en comprar un niño pequeño en Facebook, decidió enviarles un mensaje y organizar la venta. Aunque inicialmente alegó problemas económicos como motivo de su acción, pronto se reveló que había utilizado el dinero de la venta para alimentar su adicción a las apuestas en línea.

Este caso ha puesto de manifiesto la creciente preocupación por el tráfico de personas en el país, donde las autoridades advierten que los traficantes deben ser "castigados severamente". En Indonesia, estar implicado en estas redes delictivas puede resultar en penas de hasta 15 años de prisión y multas millonarias que ascienden a 600 millones de rupias.

Este escándalo resalta la necesidad de una mayor vigilancia y protección para los más vulnerables, especialmente en un contexto donde el crimen organizado parece estar en auge. La comunidad internacional también sigue de cerca este caso, subrayando la importancia de acciones globales contra el tráfico de personas y la explotación infantil.