La División de Física de la Materia Condensada (GEFES) de la Real Sociedad Española de Física ha otorgado el Premio a la Mejor Tesis Experimental del año 2024 a Gonzalo Álvarez Pérez, un joven doctor de la Universidad de Oviedo. Su trabajo titulado 'Fundamentos de nano-óptica en materiales de van der Waals hiperbólicos' ha destacado en una competición que ha tenido lugar durante doce años, siendo la primera vez que un investigador de esta universidad asturiana recibe tal distinción.

Originario de Mieres, Gonzalo Álvarez se graduó con un Doble Grado en Física y Matemáticas en 2017 y continuó su formación con un Máster en Big Data Analytics y otro en Nanociencia. Su tesis se centra en uno de los mayores retos de la física moderna: el control de la luz a nivel atómico, cuya escala es diminuta en comparación con objetos cotidianos, siendo 100,000 veces más pequeña que el grosor de un cabello humano. Este avance podría revolucionar el mundo de las telecomunicaciones, medicina y computación, aunque la tarea presenta numerosas dificultades.

Los materiales bidimensionales, y en particular el grafeno, se han convertido en el centro de atención gracias a sus propiedades únicas, como una resistencia excepcional y una conductividad eléctrica superior. Estos materiales, con una o dos capas de átomos, permiten dirigir la luz con una precisión sin precedentes, utilizando ondas que viajan sobre su superficie de manera extraordinaria, similar a las olas en el mar.

Este fenómeno, conocido como polaritones, ha despertado un gran interés en la comunidad científica. John Hopfield, el físico estadounidense que los propuso en 1958, fue galardonado recientemente con el Premio Nobel de Física 2024 por sus contribuciones a la inteligencia artificial. Gracias a los avances en microscopía y láser, ahora es posible observar y controlar la propagación de estas ondas a nivel nanométrico.

Gonzalo Álvarez, en su tesis, investigó cómo se comportan estas ondas y desarrolló nanodispositivos innovadores, tales como nanolentes, nanoespejos y nanocables, que podrían sentar las bases para los circuitos ópticos del futuro, más rápidos que la tecnología electrónica actual.

El jurado de GEFES ha reconocido la calidad científica y el carácter innovador de su trabajo, así como su enorme potencial en aplicaciones tecnológicas. Las aportaciones de Gonzalo han derivado en múltiples publicaciones en revistas de renombre internacional como Nature y Science. Además, ha tenido la oportunidad de realizar estancias de investigación en la Universidad de Columbia y en el Instituto Fritz Haber en Berlín.

Otro aspecto digno de mención es que Gonzalo escribió el prefacio y las conclusiones de su tesis en asturiano, resaltando la importancia de la cultura local. En sus propias palabras, este premio subraya la relevancia de las investigaciones en el ámbito de la nanotecnología y la física cuántica que se están llevando a cabo en Asturias. Tanto Gonzalo como su supervisor, Pablo Alonso, destacan que la región ofrece un entorno óptimo para la investigación, contribuyendo al avance de la ciencia y la tecnología en niveles de alta especialización.