Un autobús de la compañía Alsa, que realizaba la ruta desde Lisboa a A Coruña, quedó atrapado durante más de cuatro horas en un voraz incendio forestal que devastó la ciudad de Aveiro, situada al sur de Oporto. Este autocar gallego tuvo que maniobrar y serpentear por carreteras comarcales del norte de Portugal durante dos horas adicionales en busca de un atajo que les permitiera llegar a una autopista operativa, pues todas las vías en la zona estaban cerradas. Finalmente, lograron acceder a la autopista a 70 kilómetros de Braga, después de siete horas de penurias.

A bordo viajaban 15 pasajeros, entre ellos tres peregrinas portuguesas de 70 años y varios niños. David Santos González, un pasajeros gallego que se dirigía a Vigo, ayudó al chofer utilizando Google Maps para encontrar el mejor camino. Santos, que venía de un evento de artes marciales en Brasil, relató a La Voz que las llamas estaban muy cerca: "Hemos salido a las nueve de la mañana de Lisboa. A las 10:20 fue cuando nos desviaron hacia la N1, pero tuvimos que parar porque el humo era denso y el fuego estaba muy próximo. Los bomberos nos traían agua y repartían suministros", aseguró.

Durante el viaje que se extendió por un total de más de cinco horas, los pasajeros tuvieron que permanecer encerrados en el autobús a temperaturas que alcanzaban los 40 grados. David Santos compartió comida y chocolatinas entre los viajeros, quienes mantuvieron la calma en todo momento, evitando situaciones de pánico a pesar de las circunstancias críticas.

El incendio ha tenido un impacto devastador, afectando gravemente el pueblo de Albergaria-a-Velha, donde varias casas han resultado destruidas. Lamentablemente, tres personas han perdido la vida, incluido un valiente bombero. Se ha reportado también una veintena de heridos. La Unión Europea ha comenzado a movilizar recursos para enfrentar esta crisis que asola la región de Aveiro, donde las llamas siguen arrasando, y se han cerrado múltiples carreteras y autopistas, complicando aún más la situación para quienes intentan escapar del desastre.