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¡Increíble! ¿Por qué los perros grandes viven menos que los pequeños? Un nuevo descubrimiento podría cambiarlo todo

2024-09-24

El tamaño de un perro realmente tiene un impacto significativo en su longevidad. Mientras que animales como la ballena de Groenlandia pueden vivir hasta 200 años y los pequeños insectos como la mosca común apenas llegan a 28 días de vida, el mundo canino ofrece una paradoja fascinante.

A pesar de que generalmente asociamos la longevidad con el tamaño, en el caso de los perros esto no es tan claro. Las expectativas de vida en las diferentes razas de perros pueden variar drásticamente; algunas razas pequeñas, como los chihuahuas, pueden vivir hasta 16 años, mientras que perros grandes como los terranova no suelen superar los 10 años.

Esto inevitablemente plantea la pregunta: ¿por qué los perros grandes tienen una vida más corta? Investigadores del Dog Aging Project en la Universidad de Washington están trabajando para desentrañar este misterio. A través de sus estudios, han llegado a la conclusión de que el crecimiento rápido podría ser una de las razones principales. A medida que los perros de razas grandes crecen, experimentan un notable estrés biológico en sus cuerpos, que podría provocar un deterioro celular prematuro.

Silvan Urfer, veterinario de este proyecto, explica que los perros grandes enfrentan una mayor cantidad de crecimiento que puede ser perjudicial. Por ejemplo, un terranova, que puede pesar hasta 70 kilos, vive de 9 a 10 años, mientras que un chihuahua, que pesa alrededor de 3 kilos, puede vivir de 14 a 16 años. Esta diferencia abismal se debe a cómo sus cuerpos manejan el crecimiento y las enfermedades relacionadas con la edad.

Los investigadores creen que este crecimiento acelerado causa daños a nivel celular, como la pérdida de telómeros y un aumento en el daño oxidativo. A diferencia de otras especies donde la longevidad está más claramente dividida como entre tortugas y mosquitos, en los perros todos pertenecen a la misma especie, lo que añade complejidad a sus genética y sus respectivas vidas.

Por si fuera poco, la longevidad de nuestros amigos de cuatro patas también puede influenciarse por factores como la genética, el cuidado veterinario, la alimentación y el ejercicio. Un perro bien alimentado y que realiza actividad física regularmente, independientemente de su tamaño, puede tener una mejor calidad y duración de vida.

Este hallazgo no solo es vital para comprender por qué nuestros grandes peludos tienden a vivir menos, sino que también abre la puerta a investigaciones que podrían ayudarnos a mejorar la salud y longevidad de todas las razas de perros. ¡Es hora de cuidar a nuestros amigos de cuatro patas de manera que puedan vivir una vida más larga y feliz!